A través de un crítico análisis del manejo de los recursos por parte del gobierno renovador de Misiones, el FTEL puso de relieve “que es falaz ese planteo por el cual ‘todo peso que ingresa se destina a salarios’. A pesar del impacto de la crisis” entre 2020 y 2024 “la provincia registra un incremento de recaudación de casi el 30% real”, sin embargo, los sueldos docentes están planchados, consolidándose un proceso altamente regresivo contra los trabajadores de la educación.
Un informe construido en base a información oficial de recursos provinciales, nacionales, ejecución presupuestaria y salario inicial docente, difundido en las últimas horas por el Frente de Trabajadores de la Educación en Lucha (FTEL) dejó en evidencia que hay cientos o miles de millones de pesos que no se invierten en los sueldos de los docentes de Misiones.
“A la hora de analizar el salario inicial, cruzando esos datos con otros tales como recursos por recaudación propia provincial, recursos nacionales y ejecución presupuestaria, durante el periodo ene-20 a ago-24, a valores constantes (es decir, en términos reales), se observan los siguientes aspectos:
I) Si bien es notoria la caída de todas las variables en términos interanuales a la fecha, como es de público conocimiento, no deja de ser cierto que así tomado el periodo antes mencionado, mientras que al final de la serie el salario y los recursos nacionales están prácticamente al mismo nivel que al inicio, los recursos provinciales muestran un incremento importante.
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II) Si bien hay comportamientos similares en las variables, movimientos tipo “serrucho” con amesetamientos, hay momentos que constituyen una bisagra y que determinan tendencias. Por ejemplo, el salario registra un crecimiento de tipo serrucho hasta el periodo jul-21, punto pico de la variable. A partir de allí, decrece y se estabiliza; vuelve a tener un movimiento zigzagueante sin recuperar la marca máxima de la serie, para desplomarse después del periodo oct-23; o sea, el salario toca su nivel máximo en jul-21 para luego de una especie de meseta, comenzar a derrumbarse. Pero, por otro lado, a jul-21 los recursos provinciales siguen incrementándose hasta alcanzar el máximo de la serie en ago-22. Desde ese momento se registra una caída escalonada que se estabiliza desde ene-24.
III) Esta observación también se constata al analizar la representación de Gastos de Personal (salarios) sobre Gastos corrientes, donde 2022 y 2023 aparecen por debajo de los niveles de 2021, que es cuando se registra el nivel máximo de salario.
IV) En lo que respecta a los recursos nacionales, se observa una tendencia amesetada con subas y bajas más prominentes, con picos en los meses de junio, aunque el máximo corresponde a may-24. Mientras que jul-21 fue tope salarial de la serie y a partir de allí se registra una caída, los recursos nacionales continuaron incrementándose en forma de zigzag hasta jun-22, momento a partir del cual se da un movimiento de onda con tendencia regresiva que se asienta prácticamente en el mismo nivel que inicia el corte.”
“En conclusión, podemos afirmar que mientras jul-21 fue el punto máximo alcanzado por el salario en el periodo comprendido, luego del cual comienza una tendencia regresiva, los recursos nacionales y provinciales continuaron registrando incrementos hasta alcanzar sus máximos”, plantearon desde el equipo técnico del FTEL.
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“Estos datos son reveladores en cuanto confirman que es falaz ese planteo por el cual ‘todo peso que ingresa se destina a salarios’. A pesar del impacto de la crisis, durante el periodo abarcado, la provincia registra un incremento de recaudación de casi el 30% real, mientras que el salario está casi en el mismo punto de arranque”, denunciaron desde el frente educativo.
De acuerdo con el FTEL, cuyos técnicos elaboraron los informes en base al INDEC, DNAP (MECON), Ministerio de Hacienda de Misiones, Agencia Tributaria de Misiones y la Consultora Politikon Chaco, los datos “demuestran que el Gobierno provincial ha consolidado desde fines de 2021, todo el 2022 y el 2023 una tendencia salarial regresiva acentuada a fines de ese último (año), con un desplome descomunal que continuó hasta el segundo trimestre del 2024”.
“Si bien es clara la caída de todas las variables en términos reales interanuales a la fecha –inobjetable, de público conocimiento y repudiable– no deja de ser cierto el hecho de que no existió voluntad política de atenuar los impactos regresivos, que ya se detectaban antes de la situación crítica desatada a fines del 2023”, plantearon desde el FTEL.
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“Contando con márgenes importantes de recaudación como se advierten en los gráficos, se condenó a los trabajadores a soportar condiciones salariales desfavorables que (los) colocaron en posición aún más desfavorable para lo que vendría”, explicaron desde el frente.
En esta línea, la multisectorial docente de Misiones advirtió que “es doblemente lamentable esto que se señala, ya que no solamente hablamos de un patrón regresivo en términos reales, sino también que, a la hora de hablar de salario inicial, estamos hablando del esquema de garantía nacional que postergó de sobremanera muchas aspiraciones para mejorar la calidad del salario, con los perjuicios en carrera, antigüedad y jubilaciones.”
Para el equipo técnico del FTEL, está claro que “la irrupción consciente y organizada de los trabajadores de la educación obliga al Gobierno a dar respuestas. El aumento en la masa presupuestaria a Gastos de Personal en 2021 es prueba de ello. Pero, contrariamente, el Gobierno también actúa ajustando frente a nuestros retrocesos, como lo corrobora el periodo post 2016”, concluyeron.