Agustina Franco, una estilista que formaba parte de la ex Asociación de Peinadores y Afines de Misiones señaló que se están sufriendo incrementos semanales en los elementos que se usan en el rubro, además de fuertes subas en las locaciones inmobiliarias de las peluquerías. “Me gustaría que se pudieran mantener los precios de productos nacionales”, planteó.
Actualmente, según datos oficiales del municipio de Posadas, hay 9 locales habilitados como peluquerías y afines en la capital misionera, lo que estaría mostrando un crecimiento de la informalidad en un sector que por la crisis económica está en crisis, desde diciembre del año pasado.
En diálogo con el programa “El País de la Libertad” que se emite por Radio Up 95.5, la estilista Agustina Franco, de la ex Asociación de Peinadores y Afines de Misiones, ratificó que están dándose cierres de locales y modificaciones en las modalidades de trabajo de los estilistas, que optan por trabajar a domicilio o compartir alquileres, entre otras, para continuar con su actividad en un contexto de incrementos abruptos en los precios de los insumos y de los alquileres.
“Enfrentar la crisis económica en Argentina implica una gestión bastante cuidadosa de los costos. Esto incluye, por ejemplo, la optimización de los suministros y la búsqueda de proveedores con precios competitivos. Además, es importante revisar constantemente los precios de los servicios ofrecidos para asegurarse de que estén alineados con la realidad económica del país, ya que esto constantemente está variando, debemos estar muy, muy atentos”, puntualizó Franco, en diálogo con “EPDL”.
En cuanto a los costos de la actividad de las peluquerías, Franco remarcó que están sufriendo aumentos semanales. “Siempre estamos atentos al aumento de los precios de los productos que se realizan prácticamente todas las semanas. Hay veces en que suben un porcentaje de un 50%, un 100%. Por esa razón debemos estar muy atentos a esas subas para poder nosotros alinearnos también”, detalló la estilista.
De acuerdo con Franco, existen numerosas distribuidoras de insumos para peluquerías en Posadas, y a nivel nacional, pero los aumentos de precios fueron pronunciados y constantes. “Con la suba de precios a fin de año comenzó a escalar de una manera muy rápida. Es una cosa que no se puede controlar, es una locura como fue avanzando”, opinó la estilista.
Otro de los problemas que enfrenta el sector, es el incremento en los alquileres. “La problemática de los alquileres se puede abordar mediante negociaciones también con los propietarios para intentar alcanzar acuerdos que reflejen la situación económica actual. Además, se puede explorar opciones de locales más pequeños. O compartir espacio con otros profesionales puede ayudar a reducir los costos asociados con el alquiler, por ejemplo, porque los alquileres también han subido en un 100% y en algunos casos un 130%”, comentó la estilista.
Y graficó: “En mi caso me subieron un 100% e incluso me han dicho que me subirían cada tres meses, o sea, es tremenda la suba de alquileres”.
En tanto, producto de la recesión económica actual, “hay una disminución de la demanda. Es crucial en estos tiempos, ser creativos en la generación de nuevas propuestas y promociones que atraigan a clientes y los mantengan leales al negocio. Esto podría incluir descuentos por servicios combinados, programas, flexibilización o la introducción de nuevos servicios que respondan a las necesidades cambiantes de los clientes. Además, ofrecer un excelente altos estándares de calidad puede ayudar a diferenciar negocios y retener clientes, incluso en estos tiempos difíciles que estamos viviendo. La verdad hay que ser muy creativos”, señaló Franco.
Por otra parte, la estilista recalcó que los profesionales de Posadas, constantemente se están capacitando y perfeccionando en la actividad, y “están siempre preocupados en mejorar su calidad de servicio, de innovar, a pesar de que los costos de las capacitaciones son altísimos”.
Finalmente, Franco confirmó cierres de locales producto de la debacle en la actividad. “Hay muchos colegas que han tenido que cerrar, o que han tenido que compartir locales como para mantenerse en actividad. Yo comparto por ejemplo el espacio para poder mantener mi gente (empleados), mi local. Y hay muchos colegas que han tenido que cerrar y han tenido que buscar otras opciones de trabajos a domicilio y buscar otra manera de trabajar”, concluyó.