Natalia, la madre de la joven que fue violada por el dirigente renovador Gustavo Melnik, llevó su reclamo por la elevación a juicio y por la detención del acusado, a los medios nacionales. Reveló que pese a que hay abundante prueba psicológica y ginecológica, y que su hija declaró en Cámara Gesell, el juez Ricardo Balor se negó a ordenar la detención del esposo de la jueza de faltas Vanesa Gross.
La jueza Gross quedó en la mira por una denuncia contra su esposo Melnik. El escándalo por el presunto abuso sexual gravemente ultrajante en perjuicio de una adolescente con retraso madurativo, por el que está acusado el empleado municipal y dirigente de la Renovación, Gustavo Melnik, llegó a los medios nacionales este jueves, con la nota que la madre de la víctima concedió al programa que conduce Guillermo Andino por el canal América Noticias.
Natalia, acompañada de un periodista local, expuso los pormenores del caso que involucra al dirigente del futbol de salón posadeño, que es el esposo de la jueza de faltas Vanesa Gross y yerno del pastor mediático Héctor Gross, y no dudó en señalar que el acusado no está detenido, por ser un dirigente de la Renovación. Según la mujer, ya se concretaron pericias psicológicas y ginecológicas, su hija ya se expresó en Cámara Gesell, pero de todas maneras, el juez de instrucción 6 de Posadas, Ricardo Balor no accedió al pedido de detención, únicamente ordenando la prohibición de salida del país y una caución.
Gustavo Melnik, exvicepresidente de la Asociación Misionera de Futsal y empleado del Consejo Deliberante de Posadas está acusado de violar a una menor con retraso madurativo hace dos años. La víctima (ahora de 17 años) era cercana a la familia del agresor y se reunía para jugar con el hijo de Melnik y Gross. La denuncia fue presentada ante el fiscal de instrucción 6 René Casals, el pasado 17 de mayo por los delitos de abuso sexual con acceso carnal agravado, golpes y amenazas de muerte.
Natalia, la madre de la víctima, trabajaba en el juzgado de faltas que preside Gross, motivo por el cual, Melnik habría amenazado a la víctima con provocar el despido de su madre.
Según la acusación, la víctima hacía las veces de niñera del hijo del violador, a quien conocía desde hace años, porque su madre tenían una relación de amistad con la jueza Gross desde hace 35 años, vínculo que surgió a partir de la iglesia evangélica que hoy conduce el pastor Héctor Gross.
“Soy la mamá de la víctima. La verdad que son días tremendos ponerlos en palabras realmente todo lo que lo que uno pasa, lo que uno siente, es difícil. Lo que más puedo decir es que realmente uno como familia se siente rota. Yo digo, estamos rotos. Estamos tratando de juntar los pedazos porque si bien acá la única víctima es mi hija, porque es la que sufrió el abuso sexual con acceso carnal, doblemente ultrajante, porque (el acusado) utilizó elementos contundentes también para para producir el abuso, hay una familia destruida por el vínculo que teníamos con este matrimonio, con Vanesa Gross y Gustavo Melnik, que el imputado”, comenzó diciendo Natalia.
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Según la mujer, intentan reparar la familiar a través de la justicia. “Una justicia que la verdad es produce impotencia. Sentimos un desamparo judicial en todo esto”, aseguró Milagros, señalando que “Melnik es un funcionario de la renovación, que es el poder político de turno aquí.”
“Entonces, no solamente que él es funcionario, su esposa es una jueza de la ciudad. Su suegro, es pastor muy reconocido que también está vinculado al poder de la renovación”, contó la mujer, añadiendo que se comunicó telefónicamente con el pastor para contarle lo sucedido, cuando su hija se lo confesó.
Natalia insistió en que existía un vinculo de profunda amistad y confianza entre los dos matrimonios, el propio y el de Gross y Melnik, por lo que accedió al pedido de ellos para que su hija cuide al hijo de ambos. “Iba a jugar con su niño prácticamente, siempre bajo la supervisión de los adultos, de Vanessa y de Gustavo. Por eso hablamos, este abuso de confianza”, relató la mujer, añadiendo que, en una de esas visitas, Melnik concretó la violación. “Según el relato donde manifiesta mi hija que constan las denuncias que están en el en el juzgado a cargo de Ricardo Balor, se produjo una vez”, dijo la mamá.
“La flexibilidad del juez Balor en el caso Melnik, me llama la atención. Hoy estoy acá, porque siento esta sensación de desamparo, esta sensación de que existe en nuestra provincia dos tipos de código penal, existe uno para los poderosos, para los ricos, como Melnik, con influencia que puede estar libre. Y otro para para que la gente común, porque cualquier hijo de vecino”, subrayó la mujer, en tono crítico hacia el juez Balor.
Consultada al respecto, la mujer confirmó que Melnik sigue libre porque pagó la caución, y que hubo amenazas por parte del acusado. “Eso consta en la denuncia. Es verdad. De hecho, (mi hija) vivió todo un proceso hasta que pudo contar. Dentro de ese proceso hubo intentos de suicidio (de su hija), lamentablemente. Es tremendo lo que hemos pasado, justamente porque, como yo me desempeñaba laboralmente dentro del juzgado de la doctora Vanessa Gross, él le amenazaba que yo iba a perder el trabajo y yo soy sostén de hogar”, recalcó la mujer ante el medio nacional.
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Melink “ss un hombre que está no solamente relacionado a la política, sino que también está relacionado al deporte misionero. Era dirigente de futsal. Yo sinceramente, si bien hoy solamente está la denuncia de mi hija, no creo que sea la única por el por el por el creo que sea la única. Primero por la forma en que él realizó, cometió los hechos. Y segundo, por dónde se movía, no solamente políticamente, sino que él estaba todo el tiempo en contacto con niños y con jóvenes. Pero, bueno, eso será materia de investigación. Hoy por hoy, a mí lo que lo que me compete, digamos, es luchar porque el caso de mi hija se visibilice, porque el juez, haga lo que corresponde, que administre justicia”, señaló la madre de la víctima.
Por otra parte, Natalia consideró que es muy posible que haya otras víctimas del violador. “Creemos que realmente esta no habrá sido la primera vez. Él le amenazó de muerte. Cuando él comete el abuso con acceso carnal y esto que es terrible, porque el enterarnos de esto, el escuchar el relato de la fiscalía, fue para nosotros devastador. Que haya sido doblemente ultrajada, creo que es lo más bajo que puede haber, que puede tener una persona y ni hablar, estamos de niños”, subrayó la mujer.
Asimismo, Natalia contó que su hija padeció depresión, autolesiones, cambios de conducta y aislamiento, que desembocó en un intento de suicidio, tras el cual reveló lo que hizo el acusado. En ese momento de la entrevista, la mujer se quebró. “Estoy tratando de ser lo más fuerte posible. Han pasado los meses, pero sigue siendo tan fuerte y tan impactante, porque hoy esta conversación, yo quizás no la podríamos tener y yo tendría que estar visitando a mi hija en un cementerio, por culpa de un depravado, que la justicia apaña porque tiene poder”, fustigó la mujer.
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Por último, Natalia consideró que Melnik “es un psicópata. No se le puede hablar a un psicópata, no tiene empatía, no siente dolor por el otro, entonces la verdad que no puedo decirle nada. Yo lo único que le pido a la gente, uso este medio que sé que llega a tantos lados, es que si hay alguna otra víctima que se anime a hablar, que no tenga miedo, que vamos a estar para acompañar. Uno a veces siente el desamparo con la justicia (de Posadas) Porque después hay que estar en un medio nacional pidiendo que el juez haga su trabajo, que se haga justicia”, se quejó la mujer.
“Es impensado que yo tenga que estar ante un medio nacional que el juez haga su trabajo. Tendría que estar descansando no tener que estar saliendo y exponerme, y exponer a mi hija, porque Posadas es una ciudad que está creciendo, pero es una ciudad chica. Yo salgo de acá y tengo que ir a trabajar. Y es una forma de exponerle y estigmatizarla a mi hija. Es tremendo que yo tenga que estar acá. Ojalá que la causa pronto se eleve a juicio”, añadió Natalia ante el medio nacional.
“Lo único que pido es que el juez tome todos los recaudos, que haga todo lo que tenga que hacer, que ponga el expediente a derecho para que cuando vaya a un tribunal oral no hagan caer el expediente y tenga que volver a su juzgado de origen, para que siga retrayéndose la justicia. No hay más injusticia que la falta de justicia”, concluyó Natalia.
