Lo advirtió el referente del FTEL y de UTEM (CTAA) Leandro Sánchez, quien remarcó que el momento de la próxima mesa salarial con el sector, está muy cerca de la fecha de cierre y confección de las liquidaciones salariales, por lo que los gremios tendrán poco tiempo para iniciar un plan de lucha que tenga un impacto concreto sobre los salarios. Además, alertó sobre la desnutrición que se está viendo en alumnos misioneros y tendrá un impacto profundo y difícil de revertir en los niveles educativos y en el desarrollo de futuras generaciones.
“Nos llevaron al día 17 de septiembre, cuando vamos a tener la mesa salarial y es una fecha límite”, resumió el secretario general de UTEM (Unión de Trabajadores de la Educación de Misiones) Leandro Sánchez, en diálogo con el portal www.radioup.com.ar sobre la paritaria en el sector docente de Misiones, que entra en su fase definitoria y podría dejar a los trabajadores de la educación con una recomposición salarial que no les permitiría recuperar lo que perdieron en términos de poder adquisitivo, desde octubre del 2023 a la fecha.
De acuerdo con el referente del Frente de Trabajadores de la Educación en Lucha (FTEL), teniendo en cuenta cómo se viene manejando la discusión salarial por parte del Ministerio de Hacienda con otros sectores de estatales, como el de Salud Pública, se puede anticipar que la recomposición salarial será mínima, o cuando menos, inferior a la pretendida. “A ATE Salud no le dieron nada, la verdad que vamos a un panorama bastante difícil, porque el 17 ya es una fecha límite. El 20 (de septiembre) van a cerrar por contabilidad los salarios, así que nos quedan tres días, 17, 18, 19 para para ver cuánto (será el monto del aumento salarial), porque nos dicen que va a haber una recomposición, pero lo que no nos dicen es el monto”, explicó Sánchez a este portal, sobre la estrategia dilatoria del gobierno provincial con los empleados estatales.
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Ampliando sobre la cuestión, Sánchez remarcó que esperaban que la puja salarial se resuelva antes, para no tener que llegar a paros y movilizaciones en Misiones, como las históricas protestas de mayo, donde confluyeron sectores docentes, sanitarios y policías. “Tuvimos 4,2% de inflación este mes (agosto), el otro mes también, tiene algún número parecido. Nosotros (por el FTEL) queríamos que por lo menos (el aumento) tenga dos dígitos, pero no hay ningún comentario, ninguna respuesta”, alertó.
“Tenemos diálogo, estamos comunicados, pero no hay un número, y nos llevan a una fecha límite. Yo supongo que, si no hay un número, nosotros vamos a tener que evaluar, un nuevo plan de lucha al que no queremos llegar. Pero la verdad es que se está haciendo muy difícil porque no vemos señales. A los otros (sectores) a los que los han atendido (en mesas salariales) como a los de salud, la respuesta es bastante negativa”, añadió Sánchez.
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Insistiendo sobre las fechas de las mesas salariales – con Salud Pública, la reunión está pautada para el 18 de septiembre – Sánchez comentó: “eso es muy mala señal, porque si quieren darte poco te llevan al último día. Entonces, si vos aceptás o no aceptás, ya está el número. Si lo hacen público, ya está, eso es lo que te van a dar. Así que un plan de lucha va a requerir un mes para volver a discutir. La verdad es que estamos muy preocupados con eso”, sintetizó el referente de UTEM.
Por otra parte, consultado sobre la recuperación salarial de los docentes, que como con los trabajadores de Salud, no es completa, porque los aumentos otorgados no logran compensar la pérdida del salario real que el gobierno provincial impuso con el congelamiento de haberes entre octubre 2023 y junio 2024, Sánchez explicó que en la docencia, sufren exactamente lo mismo que en Salud Pública (pérdida del salario real del orden de los 60 puntos, al comparar la inflación acumulada y la evolución del salario entre octubre y agosto), con un agravante: la falta de inversión en infraestructura escolar y en alimentos para los comedores.
“Vivimos la misma situación con respecto a lo salarial, pero con respecto al resto de la escuela y el resto de la educación, estamos realmente muy para atrás, porque siempre hablamos del tema del comedor, que no se registra ningún aumento, con la situación social que se va degradando día a día. Va quedando gente sin trabajo, va terminando la zafra yerbatera, los hijos de los tareferos tienen menos posibilidad de comer, y en la escuela no hay (alimentos). Entonces, no hay comida o la comida es poca o de baja calidad nutricional”, describió Sánchez.
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En un análisis muy crudo, el referente de UTEM advirtió que la falta de alimentos o las escasas partidas de dinero para sostener los comedores escolares, impactarán negativamente en el rendimiento educativo y en el futuro académico y laboral de los chicos actualmente perjudicados por el ajuste fiscal, la desocupación y la crisis económica que desató el programa económico del gobierno nacional y sus aliados provinciales.
“Vamos a un problema muy grave, que no es solamente el hambre del momento, sino es el desarrollo de los niños, el desarrollo mental, corporal, que tiene que darse con los nutrientes que necesita. Y si en la casa no está, la escuela podría suplir eso, pero no está pasando. Nos enfrentamos al futuro de esos niños desnutridos con desnutrición crónica, que no se van a desarrollar convenientemente y nosotros queriendo enseñar a esos niños”, alertó Sánchez. Y amplió: “después nos echan la culpa a nosotros (los docentes), dicen que los niños no aprenden por la culpa de que hay paro”.
“Pero también hay que contemplar esa otra situación social que se va agravando”, remató Sánchez.
