El tesorero de la Confederación Económica de Misiones, visitó los estudios de Radio Up 95.5 y destacó los desafíos económicos y reclamó medidas concretas: “Hay que bajar impuestos o al menos dar condiciones preferenciales a las pymes”, enfatizó.
El año 2024 será recordado como uno de los más desafiantes para la economía argentina, particularmente para regiones como Misiones, que han debido adaptarse a los cambios abruptos impuestos por las nuevas políticas del gobierno nacional.
Alejandro Haene, contador público y miembro de la Confederación Económica de Misiones (CEM), dialogó con “RX – Realidad Mixta” y ofreció un análisis profundo sobre lo que este año representó para los distintos sectores productivos de la provincia y las expectativas para 2025.
“Ha sido un año difícil, complicado, con reglas de juego nuevas y un cambio de paradigmas que nos tomó por sorpresa” sostuvo Haene. Según el dirigente, muchos sectores enfrentaron un “shock” al tener que adaptarse de manera casi inmediata a nuevas normativas y restricciones presupuestarias. “Si a vos te dicen que en junio del 2025 vas a tener que ajustarte a ciertas reglas, al menos tenés tiempo para programar, pero esto fue de la noche a la mañana”.
Obra pública detenida y un sector privado cauteloso
Uno de los sectores más golpeados en Misiones fue la construcción. Haene explicó que, mientras la obra pública quedó paralizada por falta de fondos, el sector privado también se vio afectado: “Al principio hubo un parate porque mucha gente acomodó el dólar a $2.500, pero hoy está en menos de $1.200. Eso generó incertidumbre y precaución”.
Además, destacó las diferencias en la relación laboral en este rubro e indicó que “el sistema de fondo de desempleo para los trabajadores de la construcción les brinda cierto respaldo, pero esto no sucede en otras actividades”.
Sin embargo, no todas fueron malas noticias. Haene destacó el desempeño del comercio y los servicios en Misiones, que lograron sortear las dificultades gracias a políticas provinciales como los programas Ahora Misiones. “Estos programas han sido centrales para sostener el empleo, tanto directo como indirecto”, afirmó, remarcando que el comercio sigue siendo uno de los mayores generadores de trabajo en la región.
Competencia internacional y presión fiscal
En el sector maderero, la situación es compleja. Aunque las exportaciones logran empatar los costos, estos siguen subiendo: “Los sueldos, las cargas sociales, la energía eléctrica y la logística están dolarizados y eso nos complica”, explicó. A esto se suma la feroz competencia internacional, con grandes jugadores atentos a cualquier oportunidad de ganar mercado.
Por otro lado, Haene subrayó la necesidad de una reforma fiscal urgente para las pymes, criticando la carga tributaria actual y apuntó que “no se puede aplicar la misma vara a Ford o Chevrolet que a una pyme de Misiones, con costos de logística altos y el combustible más caro del país”.
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Cambios estructurales en AFIP y desafíos administrativos
Respecto a las reformas implementadas por el gobierno, como la transformación de AFIP en ARCA, Haene expresó escepticismo: “Hasta ahora solo ha cambiado el nombre. Los problemas de fondo, como los trámites lentos y los saldos a favor que no se devuelven a tiempo, siguen sin resolverse”.
Además, pidió un enfoque más ágil en los procesos administrativos y remarcó que “en una época donde la economía del conocimiento brilla, necesitamos trámites más expeditivos y mejores condiciones para emprendedores.»
De cara al futuro, Haene propuso ideas concretas para incentivar la economía regional, como eximir del pago de ingresos brutos a los emprendedores durante su primer año de actividad. También enfatizó la importancia de atraer más contribuyentes al sistema impositivo: “No podemos seguir pescando en la misma pecera. Necesitamos ampliar la base tributaria en lugar de seguir asfixiando a los que ya están”.
Expectativas para 2025
Pese a las dificultades, Haene se mostró moderadamente optimista sobre el futuro: “Creo que la población ve una luz al final del túnel. La baja de la inflación es alentadora, pero necesitamos políticas que garanticen un equilibrio real y sostenido”.
Con la esperanza de un año más próspero, el dirigente concluyó: “Por el bien de todos, especialmente del ciudadano de a pie, necesitamos medidas que reanimen el tejido productivo y protejan el empleo”.