Una tarde de horror vivió Ingrid Benítez, vecina del barrio Hipódromo, en cercanías de Itaembé Guazú, cuando su hijo fue víctima de un intento de secuestro a plena luz del día. El hecho ocurrió en horas del mediodía, cerca de las 13, mientras el menor regresaba de la escuela. Según relató Benítez, el niño fue abordado por un hombre que descendió de un auto negro, intentó tomarlo por la fuerza, pero el chico logró escapar después de romper su buzo y refugiarse en un área de monte cercano.
“Mi hijo hizo dos cuadras desde la parada del colectivo y de un auto negro, no se acuerda qué auto ni qué patente, bajó un tipo, le agarró la mano y le decía ‘vení, vení’. Al no poder escaparse, se rompió el buzo y salió a correr”, contó Benítez con angustia a “La Última Rosca” de Radio Up 95.5. Según añadió, el menor pudo esconderse en una zona de monte y así evitar ser llevado.
Tras el intento de secuestro, Benítez denunció el hecho ante la policía. “La policía vino varias veces, también se acercaron los jefes del foro de seguridad de Itaembé Guazú para revisar las cámaras de las zonas centrales por donde pudo haber salido el auto”, explicó. El foro de seguridad local está colaborando en la investigación, y las autoridades buscan cualquier pista que pueda llevar a identificar al agresor.
A pesar de la gravedad del incidente, Benítez comentó que no tiene conocimiento de que hechos similares hayan ocurrido en el barrio. “Yo hace ocho meses recién estoy acá y no estaba enterada de que hubiera pasado algo así antes”, señaló. Sin embargo, la comunidad se mantiene alerta y en contacto a través de grupos de WhatsApp, donde se informan sobre cualquier situación sospechosa o vehículos extraños que circulan por el barrio.
Este intento de secuestro despertó preocupación entre los vecinos, especialmente por la falta de patrullaje en las horas pico, cuando los niños van y vienen de la escuela. “Con el foro de seguridad estaban hablando de que en hora pico se patrulle más esta zona, que es bastante aislada y donde los chicos van solos porque algunos padres no pueden llevarlos ni traerlos”, indicó Benítez.
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El barrio de Itaembé Guazú, según la vecina, no fue escenario de muchos episodios de inseguridad hasta ahora. “Solo una vez escuché que quisieron robar en una casa, pero no mucho más”, dijo, aunque admitió que este hecho cambió su percepción de la seguridad en el lugar.
En cuanto a cómo se siente después de lo ocurrido, Benítez expresó su desesperación. “Es un acto desesperante, uno no espera que le pase esto, ni tampoco piensa que algo así pueda ocurrir. Mirás las noticias de otros lados y no te imaginás que te va a pasar a vos”, confesó.
Frente a lo sucedido, ella ya ha decidido tomar medidas para proteger a su hijo: “Ahora vamos a tener que buscar otras formas para que él vaya y venga de la escuela. Es alarmante lo que está sucediendo acá”, completó.
