Argentina se enfrenta a unas elecciones presidenciales este domingo que son cruciales en un país que empezó el siglo XX siendo una de las naciones más ricas del mundo. Hoy tiene un 40% de población pobre y un 10% de indigentes.
Con un 30% de votos en las primarias, Javier Milei, de 52 años, se ha convertido en el favorito para ganar las elecciones este próximo 22 de octubre. Representa al partido La Libertad Avanza y es libertario. Es decir, cree en un sistema basado en la libertad individual y en la no intervención económica por parte del Estado. Pero más allá de eso, lo cierto es que Javier Milei se ha convertido en un fenómeno político muy polémico en Argentina.
El perfil de Javier Milei: ¿El próximo presidente argentino?
Economista y amante de los perros, Milei ha sacudido los debates con propuestas como privatizar las empresas públicas del Estado, permitir la compraventa de armas en Argentina, “dinamitar” el Banco Central y “dolarizar” la economía.
Juan Carlos Martínez Lázaro, profesor de economía en la IE University, comparaba, en COPE, a Milei con otros políticos de extrema derecha como el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el de Brasil, Jair Bolsonaro. En su último mitin, esta misma semana, hizo su aparición entre acordes de heavy metal, asegurando que quiere convertir Argentina en un paraíso fiscal y renegando del cambio climático, ya que cree que es un invento del socialismo.
Motivos para entender cómo Javier Milei se convirtió en uno de los favoritos
Hace unos años, un candidato como él no habría tenido ninguna opción, pero en 2023, con una inflación en el 138,3%, una deuda imposible de pagar y el desgaste de las opciones políticas tradicionales, elevan las posibilidades de un político como él.
En estos momentos, muchas encuestas vaticinan una segunda vuelta electoral en noviembre porque no es seguro que alguno de los candidatos logre el 40-45% de los votos necesarios. Se la juegan Sergio Massa, de izquierdas, peronista y actual ministro de finanzas, Patricia Bullrich de la derecha tradicional, y Javier Milei, de ultraderecha.
Según la ley electoral argentina, el sábado pasado fue el último día para la publicación de encuestas y, de los ocho sondeos realizados en Argentina en lo que va de octubre, siete anuncian que Milei será el más votado.
Posibles sorpresas en las elecciones presidenciales de Argentina
Eduardo Reina, analista y consultor político argentino, explica en las dos sorpresas que se pueden dar el domingo en las elecciones presidenciales: “Una es que Milei gane en primera vuelta. A esto le atribuyo un 10% de probabilidades. Y la otra gran sorpresa es que no entre Sergio Massa al balotaje y entre Patricia Bullrich”.
En Argentina, para conseguir ser presidente, el candidato debe obtener el 45% de los lo votos totales o el 40% de los votos junto a una diferencia superior a 10 puntos respecto al segundo candidato. Si esto no se consigue, se realizará una segunda vuelta, también llamada balotaje, donde se convertirá en presidente el candidato que más votos obtenga, sin importar su porcentaje o la diferencia con los otros. Si este domingo no se define al presidente, el balotaje se celebrará el 19 de noviembre.
El experto sostiene que más de un 60% de la población argentina está esperando un cambio. “Hoy por hoy, el cambio podría venir, exclusivamente, por un libertario que no sabemos como va a reaccionar, si vamos a ser un experimento libertario”, -explica Eduardo Reina refiriéndose a Milei-, “o si vamos a ser un Gobierno de shock controlado” -apunta sobre Patricia, que podría estar en el balotaje si, según el experto, su narrativa llega a la gente diciendo que es el shock controlado que el país necesita para vender al oficialismo de Sergio Massa.
El consultor político describe la situación actual en Argentina: “Hay mucho trabajo en negro, mucho peligro de seguridad, mucha tristeza en un pueblo que siempre fue alegre, mucha incertidumbre… De hecho, mi hijo de 18 años está en Australia. Él no piensa volver y nos pregunta que qué hacemos ahí”. Con esto describe la situación de las siguientes generaciones que no ven a su propio país como un lugar en el que prosperar. “Nadie ve ninguna posibilidad seria de que esto no salga sin un shock y que los jóvenes argentinos vean una realidad posible. Hoy no la ven, porque si Sergio Massa entra al balotaje, los jóvenes van a ver la misma incertidumbre”, lamenta.