Las universidades nacionales decretaron un nuevo paro de 48 horas en reclamo de una recomposición salarial y mayor presupuesto para gastos de funcionamiento. El conflicto entre el sector universitario y el gobierno nacional persiste desde el año pasado, sin avances en las negociaciones paritarias.
En este contexto, Guillermo Durán, decano de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la Universidad de Buenos Aires (UBA), dialogó con “La Última Rosca” de Radio Up 95.5 y explicó la grave situación que atraviesan docentes y no docentes: “Desde la asunción del Gobierno de Milei, en estos 15 meses hemos perdido en valor real nuestros salarios un 25 %. De alguna manera lo que decimos es que cada cuatro meses nos están pagando tres”.
Según Durán, para recuperar el poder adquisitivo perdido desde diciembre de 2023, los docentes necesitarían un aumento inmediato del 35 %, sin contar la inflación futura. “Eso suponiendo inflación cero. Si hubiera inflación del 2%, hay que sumarle además la inflación mensual”, aclaró. En cuanto al presupuesto universitario, indicó que “hasta lo que sabemos, al no haber presupuesto, no tenemos información, pero lo que sabemos es que la actualización del 2024 al 2025 ha sido cero en los gastos de funcionamiento”, en un año en el que la inflación rondó el 120 %.
Además de los salarios y el presupuesto de funcionamiento, otro eje de preocupación es el desfinanciamiento del sistema científico y tecnológico. “Hay una justa feroz, con subsidios que no se entregan, ingresos al CONICET que no se otorgan y becas que se dan en menor cantidad de lo prometido”, denunció Durán. En este contexto, aseguró que “es muy difícil sostener un sistema de calidad en las universidades y en el sistema de ciencia del país”.

El impacto en los estudiantes
A pesar de la crisis, Durán señaló que la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la UBA no ha experimentado una disminución en la matrícula estudiantil. “Nosotros teníamos hasta cinco años atrás unos 800 o 900 ingresos por año. Ahora estamos teniendo entre 1.400 y 1.500”, detalló. Sin embargo, reconoció que la universidad ha tenido que reforzar el apoyo económico a los estudiantes: “Hemos aumentado el número de becas de transporte y mejorado el valor de nuestras becas de ayuda económica”.
Frente a la reducción del presupuesto estatal, algunas facultades han optado por aumentar la prestación de servicios para generar fondos. Sin embargo, Durán enfatizó que esto no debe reemplazar la responsabilidad del Estado: “Siempre dejamos muy en claro que lo que hace falta para que la universidad pública funcione tiene que ser proporcionado por el Estado. Por supuesto que puede haber ingresos adicionales, pero no lo planteamos como un reemplazo”.
Por otro lado, Durán se refirió al debate sobre el cobro de aranceles a estudiantes extranjeros en universidades públicas y desmintió su aplicación: “Son de las cosas que el gobierno pone en agenda cuando quiere que se deje de discutir algún tema que lo complica”. Explicó que la mayoría de los estudiantes extranjeros en la universidad son residentes y que el porcentaje de alumnos no residentes es insignificante: “Nos hablaban de arancelar los extranjeros no residentes y yo decía, en términos matemáticos, que es un conjunto vacío”. Según sus datos, la proporción de extranjeros en su facultad ronda el 5 % y su presencia enriquece el intercambio académico con la región.
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Una consulta popular vinculante
Ante la falta de respuestas del Gobierno, Durán propuso una medida concreta: “Lanzamos la convocatoria de una consulta popular vinculante que pueda refrendar una ley de financiamiento universitario”. Recordó que en 2023 el Congreso había aprobado una ley que garantizaba el financiamiento adecuado, pero fue vetada por el presidente Milei. “La Constitución del ‘94 nos da una herramienta en su artículo 40: las consultas populares vinculantes”, explicó.
La propuesta consiste en que el Congreso apruebe nuevamente una ley de financiamiento universitario y la someta a votación popular. “El presidente no puede vetar una consulta popular vinculante y su resultado debe ser aceptado”, señaló Durán.
También recordó que, durante su campaña, Milei se había mostrado a favor de recurrir a esta herramienta cuando la “casta” le impidiera avanzar con ciertos proyectos. “Lo que nosotros planteamos es que sea el pueblo de la Nación Argentina quien determine si quiere financiar a las universidades de la manera que hay que alcanzarlo”, concluyó.