Según indicaron desde la comunidad educativa de esta institución que tiene una matrícula de más de 800 chicos, desde hace años padecen graves problemas de infraestructura, como la filtración de agua a través de paredes y cielorraso, que afecta a la instalación eléctrica. Las autoridades del Consejo General de Educación y del Ministerio, ya están en conocimiento del reclamo pero no intervienen y los padres decidieron no mandar más a los alumnos y protestar en el colegio.
La comunidad educativa de la Escuela Normal Superior N° 9 decidió tomar el establecimiento hasta que las autoridades del Ministerio de Educación y del Consejo General de Educación se comprometan a invertir los recursos necesarios para subsanar de una vez y para siempre, los gravísimos problemas de infraestructura del inmueble ubicado en calle Juan XXIII, entre Guatambú y avenida San Martín, en Wanda.
Con el temporal de este lunes, los alumnos y docentes vivieron una situación “caótica” según reveló la directora Estela Olivera, quien contó a la redacción de www.radioup.com.ar que no podían enviar a los chicos a sus casas por la tormenta, pero, al mismo tiempo, el agua ingresaba dentro de los salones a través del cielrraso, lo que a su vez, era un riesgo por el humedecimiento de la instalación eléctrica.
Según Olivera, hace años que padecen problemas de infraestructura y ya presentaron carpetas enumerando los inconvenientes al presidente del Consejo General de Educación, Alberto “Colita” Galarza, y al ministro de educación, Miguel Sedoff, junto a supervisores y otros funcionarios, quienes no intervinieron hasta el momento.
Esta inacción de las autoridades ante los pedidos formales de la Escuela, derivó en la medida de fuerza de la comunidad educativa, que exige una escuela digna.
De acuerdo con Olivera, presentaron los reclamos por el estado edilicio de la escuela, antes “distintas entidades, ante el ministerio y CGE. Elevamos, a través de la supervisión de Eldorado, una carpeta con un informe y fotografías que muestran cómo se inundaba la escuela y como se están deteriorando las paredes”, reveló la directora.
Y añadió que la carpeta incluía “también, (las pruebas de) la acumulación de agua en los cielos rasos, que luego se escurre y cae a través de los ventiladores de techo, y los focos de luz. Hay salones que están clausurados, porque al encender el aire acondicionado, hace saltar la llave térmica, pero no por fallas en la instalación que está preparada para los equipos”, describió la docente.
Según Olivera, durante la última refacción de la escuela en cuestión, realizada en 2015 “a través de la comisión cooperadora, hicimos los cambios de la instalación eléctrica cableado eléctrico, porque habíamos decidido que los salones iban a tener aire. Así que la llave térmica no salta porque no aguanta nuestra conexión, sino que en algunos salones salta porque las paredes están humedecidas. Es que el deposito de agua humedeció los cables que están sobre el cielo raso”, añadió Olivera.
“Entonces, la situación que vivimos ayer fue muy caótica, porque nos quedamos en la oscuridad y en el momento más difícil de la mañana no podíamos enviar a los chicos a sus casas porque afuera se desató una tormenta muy fuerte. Y acá corríamos riesgos importantes porque caía agua por las paredes y techos. Era una situación extrema”, puntualizó la directora.
Asimismo, Olivera insistió en que “esto pasa desde hace muchos años, pero desde la comisión cooperadora, se hicieron arreglos y parches. Hicimos una evaluación y nos va a llevar una importante inversión hacer los arreglos, pero ya no queremos parches”, precisó.
“Es una escuela muy grande, con el nivel superior tenemos 800 alumnos. El instituto Urugua–í tiene algunas tecnicaturas y utiliza algunas aulas en el turno noche”, completó la directiva.
Por otra parte, Olivera aclaró que las carpetas con informes y fotografías, “las tienen los funcionarios, el señor Alfonso de la UCEP, porque he viajado 2 o 3 veces a Posadas, llevando todo eso; las tiene ‘Colita’ Galarza (titular del CGE); está al tanto el Director de Enseñanza Media (del CGE); y también tiene una carpeta el ministro (Miguel) Sedoff”.
“Así que, los padres decidieron no mandar a los hijos a la escuela en estas condiciones. No nos queda otra forma”, destacó Olivera, dejando en claro que no han tenido “ninguna respuesta”, hasta el momento. Y resaltó que “el supervisor Montiveros también lo está conociendo la situación”.