Pese al intento de contención de Nación, la nafta y el gasoil volvieron a subir sus precios, este miércoles, las empresas refinadoras del país aumentaron el precio de los combustibles un 4% por la devaluación y recomposición de rentabilidad.
El incremento lo aplicó primeramente Yacimientos Petrolíferos Fiscales (YPF) y la continuaron las demás compañías.
De esta manera, la nafta súper en las surtidoras de YPF en Posadas pasó de costar $997 a $1037, mientras que la infinia que valía $1197 aumentó a $1245 y la infinia diesel que estaba $1283 pasó a valer $1334.
A los incrementos de YPF en la capital provincial se le sumó la estación de servicio Shell. Es así que la nafta súper en esa empresa aumentó de $998 a $1056, la v-power subió de $1235 a $1276, la evolux pasó de $1070 a $1106.
Hasta el momento, la compañía Axion no actualizó sus valores, aunque podría hacerlo en las próximas horas.
Si bien la suba fue del 4%, se preveía un aumento mayor al 10% para este 1 de mayo, el cual frenó el gobierno nacional postergando por un mes la actualización del impuesto a los combustibles.
Sin embargo, las empresas refinadoras incrementaron sus valores por la devaluación mensual y por el aumento del barril de petróleo.
Las medidas del Gobierno para frenar los aumentos
Además de contener las subas en los combustibles, el Ministerio de Economía decidió postergar los aumentos de tarifas de gas y electricidad que tendrían que haberse aplicada a partir de mayo.
A partir de este miércoles debía empezar a regir la fórmula de actualización mensual de las tarifas de gas y electricidad que el Gobierno diseñó para que los aumentos otorgados no queden atrasados respecto de la inflación.
Sin embargo, los entes reguladores de ambos servicios, Enargas y ENRE, respectivamente, no publicaron los nuevos cuadros tarifarios a la espera de una definición de Economía.
Los entes reguladores ya tienen calculado cuánto sería la suba que le correspondería a las empresas: 10,69% para las distribuidoras eléctricas, 12,5% para las distribuidoras de gas y 12% para las transportistas de gas.
Economía debía definir si avanzaba con una quita de subsidios para los sectores de ingresos bajos (N2) y medios (N3) en gas y electricidad; si aumentaba el costo que pagan los comercios, industrias y hogares de ingresos altos, y si autorizaba el ajuste mensual de tarifas para las empresas.
Al final, nada de esos sucederá y todo continuará como estaba o peor, ya que la inflación y la devaluación mensual se mantiene al ritmo del 7% y 2% mensual y cada vez más los usuarios residenciales de ingresos bajos y medios demandan más subsidios.
