El gobierno del presidente Donald Trump anunció la reducción progresiva de los servicios en otros idiomas que ofrecen las agencias federales, tras la publicación de nuevas instrucciones por parte del Departamento de Justicia.
Trump procede a eliminar los idiomas que se consideren innecesarios
La medida surge como aplicación concreta del decreto presidencial que, desde el 1° de marzo, designa al inglés como idioma oficial de los Estados Unidos, dejando a criterio de cada agencia las decisiones respecto al uso de otras lenguas.
El memorando firmado por la secretaria de Justicia Pam Bondi plantea que cada organismo deberá realizar un inventario interno para identificar los servicios en otros idiomas y proceder a eliminar los que se consideren innecesarios.

Según Bondi, la iniciativa busca “fortalecer la unidad nacional” y fomentar la integración social y económica a través del aprendizaje del inglés. No obstante, defensores de derechos civiles advierten que la decisión dificultará el acceso a servicios esenciales, como salud o justicia, para quienes no dominan el idioma.
Más de 26 millones de personas en EE.UU. hablan inglés a un nivel inferior a “muy bien”, y más de 42 millones hablan español en casa, según datos de la Oficina del Censo 2023.
Congelan fondos para programas educativos y despiden personal
La administración Trump avanza con la desactivación del Departamento de Educación y congela fondos destinados a la enseñanza del inglés, el apoyo a migrantes y la capacitación laboral.
Mientras se desarrollaban los anuncios sobre el idioma, la Corte Suprema de EE.UU. autorizó al gobierno de Trump a continuar con el desmantelamiento del Departamento de Educación, tras suspender una orden judicial que exigía reincorporar a empleados despedidos.
En un fallo de 3 votos contra 6, el máximo tribunal dejó sin efecto la decisión del juez de distrito Myong Joun, quien el 22 de mayo había ordenado la reincorporación de 1.400 trabajadores cesanteados.
Simultáneamente, más de 20 estados presentaron una demanda federal contra el Ejecutivo, exigiendo la liberación de 6.800 millones de dólares en fondos federales que debían destinarse a programas educativos claves.
Entre los programas afectados están el aprendizaje del inglés, alfabetización para adultos, formación docente, educación para hijos de trabajadores agrícolas y actividades escolares de verano.
Los estados demandantes aseguran que el Departamento de Educación no otorgó las subvenciones en la fecha límite del 1 de julio, alegando cambios administrativos sin brindar una justificación formal. Esto provocó la cancelación o riesgo de cierre de cientos de programas en todo el país, especialmente en zonas vulnerables.
Desde la Casa Blanca, la Oficina de Administración y Presupuesto indicó que las subvenciones están bajo una “revisión programática continua”.
El Departamento de Justicia ordena al gobierno recortar los servicios multilingües en EE.UU. https://t.co/4masjCAnmX
— CNN en Español (@CNNEE) July 14, 2025