En la ciudad de Posadas, cada vez hay más animales en situación de calle, y esto repercute de manera directa en el trabajo que realizan los grupos de rescatistas de animales. En los últimos cuatro años, el número aumentó drásticamente debido a la falta de políticas de estado para los cuidados de los animales.
La tenencia responsable de animales es el conjunto de obligaciones que asume una persona o familia cuando decide adoptar una mascota, comprometiéndose a optimizar su bienestar.
Diferentes grupos de voluntarios rescatistas trabajan en la provincia, brindando cuidado y protección a los animales en situación de calle, además buscan generar conciencia en la ciudadanía con respecto a la tenencia responsable.
Silvia “Lola” Vega, integrante del grupo de rescatistas Adóptame Misiones, explicó que en los últimos años se acrecentó el trabajo de los refugios debido a la irresponsabilidad de muchas personas y a la falta de políticas por parte de la Municipalidad para atender a los animales en situación de calle: “Veníamos trabajando bien con la gestión municipal anterior, pero en estos últimos cuatro años la situación se complicó y tenemos cada vez más tarea, porque la gente no puede hacerse cargo de todos los animales”.
Vega además explicó que “generalmente a nosotros nos llaman para que actuemos como si fuéramos policías. Siempre hacemos esa aclaración. Podemos colaborar, ayudar y guiarte en lo que se puede hacer. Pero no tenemos ni poder de policías, ni siquiera la misma policía puede actuar, porque tienen que estar sujetos a la orden de un juez para poder actuar como la gente pretende, que hagamos tipo dopamiento, que saquemos el animalito, metamos presos a la persona que lo están maltratando. Pero no podemos hacer eso”.
En consonancia con esto, desde El Refugio Posadas, Franco Molina, explicó que este espacio se trata de un centro de contención y lugar de guarda y que muchas veces las mascotas son abandonadas por las personas que los adoptan: “Muchas veces pasa que la gente los adopta, los lleva a sus casas, se dan cuenta de que no son un juguete y los devuelve, lo que genera un problema. Se dan cuenta de que las mascotitas son como niños pequeños, no saben donde hacer sus necesidades y hay que educarlos, es una responsabilidad”.
La tenencia responsable es: asumir la responsabilidad de brindarles afecto, protección y resguardo durante toda su vida, garantizarles un ambiente adecuado a las características del animal, mantenerlos limpios, al igual que el lugar donde habitan y los recipientes que utilizan para alimentarse, ofrecerles una buena alimentación tanto en calidad como en cantidad. Asegurar la provisión adecuada de agua, proporcionarles un espacio para su recreación y ejercitación diaria, protegerlos de las inclemencias climáticas (por ejemplo lluvia o calor extremo), suministrarles la atención veterinaria necesaria. Garantizarles la vacunación y desparasitación necesarias, sacarlos a la calle con su respectivo collar y correa. Si es un animal de gran porte, colocarle un bozal, no abandonarlos ni dejarlos sueltos en la vía pública, salir con una bolsa para levantar sus deposiciones.