En el marco del mes de la prevención del suicidio, septiembre se ha consolidado como un período crucial para sensibilizar y visibilizar un tema que, aunque muchas veces permanece en la sombra, afecta a miles de personas en todo el mundo.
Para profundizar en este tema, Radio Up 95.5 con el psicólogo Nicolás Mussi, quien ofreció un análisis detallado sobre los factores protectores, los mitos asociados al suicidio y la necesidad urgente de un enfoque de salud pública para su prevención.
En este sentido, Mussi destacó la importancia de entender que el suicidio no es un acto aislado. “El acto suicida no es un acto individual particular, singular, aislado de un contexto, aislado de una trama social”, señaló en diálogo con el programa “El País de la Libertad”.
Para el psicólogo, es esencial considerar los factores protectores a nivel individual, familiar y social. “Un factor protector fundamental es el social”, afirmó, subrayando la relevancia de la red de contención que rodea a la persona.
El psicólogo también hizo hincapié en la necesidad de romper con ciertos mitos que rodean al suicidio, como la idea de que quienes tienen éxito en la vida, una buena apariencia o una vida social activa no pueden estar atravesando una crisis profunda.
“Podemos ver casos donde la persona posteaba cosas lindas, subía músicas alegres, tenía pareja, y aún así, puede estar padeciendo algo”, expresó Mussi, invitando a la reflexión sobre las señales que muchas veces pasamos por alto.
Uno de los temas que más preocupa a los especialistas es la percepción errónea de que el suicidio es un acto impredecible y, por tanto, inevitable. Sin embargo, Mussi fue claro al afirmar que “el suicidio es un acto prevenible”.
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Este hecho subraya la necesidad de estar atentos a las señales de alerta, como cambios en las rutinas o comportamientos inusuales en personas cercanas. “Interrogar al otro, estar más atentos a lo cotidiano”, recomendó, enfatizando la importancia de la comunicación y el apoyo emocional.
La conversación también abordó el papel de los docentes en la detección de posibles señales de alarma en los jóvenes. Mussi sugirió que, en entornos escolares, es crucial “facilitar espacios de escucha” y estar atentos a fenómenos como el bullying, que pueden ser detonantes de un malestar profundo en los estudiantes.
En cuanto al sistema de salud, Mussi criticó la falta de recursos y la accesibilidad limitada a servicios de salud mental en Argentina. “Hay todo un sistema de salud pública que debiera atender y pensarse como una alternativa ante un padecimiento de salud mental”, subrayó, recordando que la tasa de suicidios en el país es de 6,2 por cada 100 mil habitantes, lo que se traduce en aproximadamente 8 suicidios diarios.
En este sentido, Mussi lanzó un llamado a sus colegas para que adopten una actitud más flexible y empática al recibir solicitudes de ayuda. “No se sabe si esa persona que está pidiendo un turno es la última vez que está pidiendo ayuda”, dijo, instando a los profesionales a no poner barreras económicas que puedan impedir a alguien acceder a la atención que necesita.
Finalmente, Mussi recordó a la audiencia la existencia de líneas de contacto para quienes necesiten apoyo inmediato, como la línea 135 de prevención del suicidio y el 0800 345 1435. Además, adelantó que durante todo el mes de septiembre estará participando en diversas actividades y talleres enfocados en la prevención del suicidio, los cuales serán anunciados en sus redes sociales.