La columna con la cual tuve el privilegio de comenzar este camino con ustedes, a través de este maravilloso medio, véase “reciclando viejos eslóganes en la campaña a la presidencia en EE.UU”, hablábamos de dos candidatos errantes, resaltando que el ciudadano estadounidense tendría que elegir al menos malo (tenemos mucha experiencia en eso) ya que ambos presentaban mas fallos que virtudes, hoy por hoy el camino a las elecciones en uno de los gigantes del norte ha cambiado por completo.
Con el presidente Biden habiéndose bajado de la carrera presidencial y con la actual vicepresidente, Kamala Harris ocupando su lugar, el GPS electoral estadounidense se ha puesto a recalcular el rumbo de un probable resultado, que a priori, promete ser reñido hasta el último instante.
Desde el anuncio oficial en la cual se confirmaba a Kamala Harris como candidata a la presidencia, podemos decir que se hizo la luz para el partido demócrata, que ya estaba firmando su claudicación con el presidente Biden en unos de sus momentos de mayor flaqueza, mostrándose totalmente abatido durante el debate presidencial y que arrojó como resultado una cataratas de votos que se iban inclinando hacia el ex presidente Donald Trump, que dicho sea de paso, se vio totalmente fortalecido a partir de allí, y a eso sumado el infame y cobarde intento de asesinato que sufrió en uno de sus tantos discursos de campaña.
Hoy en día la realidad es otra, desde el anuncio mencionado, la recaudación del partido demócrata ha llegado a cifras más que considerables (hasta ahora llevan recaudados 310 millones de dólares, y ese monto solamente lo recaudaron el mes de julio), mas del doble de lo recaudado por el expresidente. Con el eslogan “We´re not going back (no vamos a volver atrás)”, Harris hace clara alusión a un discurso anti Trump que como mencione en la columna anterior sobre la presidencia de los EEUU, llega con un hambre de venganza y de retomar sus políticas de restricciones y de batallas comerciales a como de lugar. Como era de esperarse, la respuesta de Trump a la flamante candidatura no se hizo esperar y utilizando su cuenta de twitter (ahora llamado X) escribió que su victoria ahora será aun mas probable. No conforme con esto, lanzó ataques que rozaron lo inaudito, poniendo en duda el origen étnico de Kamala Harris. Fiel a su estilo, Donald Trump no solo actúa como candidato, sino como su propio adversario, lanzando discursos de odio que solo le sirven para perder votos.
A poco mas de 3 meses para las elecciones estadounidenses, nada esta dicho ni mucho menos resuelto y como comento más arriba, la lucha será reñida hasta el final, solo el tiempo dirá quien llegará mejor posicionado para la “batalla final” que arrojará como resultado al que gobernará por los próximos 4 años, los Estados Unidos, y ocupará unos de los sillones mas pesados del mundo.
Matías Lezcano…