Fueron 30 medias reses que no guardaban las mínimas condiciones de higiene ni contaban con la cadena de frío correspondiente.
Efectivos pertenecientes al Grupo Vial “Uruguaí”, dependiente del Escuadrón 13 “Iguazú”, se encontraban dando cumplimiento a la Orden de Operaciones del Comando de Región VI, realizando actividades de patrullaje sobre caminos alternativos.
En horas de la noche, los uniformados detuvieron la marcha de una camioneta sin patentes colocadas que, a simple vista, cargaba con una enorme cantidad de bultos envueltos en bolsas de consorcio, los cuales aparentaban contener productos cárnicos.
Fruto de una inspección más detallada, , según fuentes policiales, se constató que el contenido de las bolsas constaba de medias reses, las cuales no contaban con la cadena de frío correspondiente. Asimismo, el vehículo no contaba con las habilitaciones correspondientes para el transporte de sustancias alimenticias.
Se procedió al secuestro de 30 medias reses, de 400 kg cada una, totalizando 1.200 kg de carne cuyo valor de venta en el mercado alcanza los $ 6.000.000.
La misma no se encontraba apta para el consumo humano. Ante tal situación, se dio intervención a personal del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), quienes procedieron a su desnaturalización.