El sucesor de Alfredo Gruber frente a la Municipalidad de Puerto Esperanza puso en duda la capacidad de la comuna de abonar el medio aguinaldo de diciembre y denunció que deberá enfrentar una deuda que alcanza a medio millón de pesos que deja la gestión anterior, además de otras irregularidades.
En diálogo con Alejandro Chini y Bryan Villalba, en “La última rosca” por Radio Up 95.5, quien asumirá formalmente la gestión comunal a partir del próximo 10 de diciembre admitió que “la situación en el municipio es bastante compleja, no se logró una transición ordenada; se dificultó mucho tener acceso a la información, a lo que conlleva la administración y obviamente, también al patrimonio del municipio”, afirmó Zarza sobre el estado general que recibió.
“Hoy recién hicimos el traspaso del patrimonio del Corralón Municipal, también parte de la administración; nos vamos a encontrar con un municipio prácticamente quebrado en su totalidad porque tiene una deuda muy importante, por ejemplo con los proveedores de Puerto Esperanza y de otras localidades”, insistió.
Según lo que comentó el intendente electo, su antecesor deja una deuda calculada hasta el momento en alrededor de unos 224 millones de pesos aproximadamente. “Eso incluye a proveedores, insumos, gastos, repuestos, cubiertas. Bueno, no sé, un montón de cosas que yo ya no tuve acceso a esas facturas. Simplemente tengo un resumen de lo que es el sistema del municipio, pues es la deuda que está arrojando”, afirmó Zarza.
Además de esa cifra inicial calculada, mencionó que necesitarían aproximadamente 300 millones de pesos “para levantar el parque vial, pues tenemos un parque vial totalmente obsoleto, que ya tiene sus años; prácticamente todas las maquinarias no están funcionando. Cosas básicas, como el camión rector de residuos que tiene su motor prácticamente fundido por falta de mantenimiento; cubiertas, retroescavadora, motoniveladora. Bueno, lo que es vehículo son muy antiguos los camiones”.
Personal y sueldos
Respecto del personal, Zarza consideró que Puerto Esperanza “es un municipio que tiene mucho personal. El 60% del presupuesto se destina a pagar sueldos del personal, de los cuales el 92% del personal es planta permanente. En total planta permanente hay 324 personas y contratados hay algo así como 32 y después una población muy importante que tiene un vínculo a través de planos del municipio”.
En cuanto a la relación que mantuvo el actual intendente electo con los hermanos Gruber que se sucedieron al frente de la intendencia, aclaró que comenzó a trabajar el 10 de diciembre de 2003 hasta el 2010, con “Pato” (Gilberto) Gruber, exintendente y exdiputado provincial. “El día que se fue él como intendente, ahí entró el hermano, Alfredo Gruber y yo me fui del municipio. Inclusive yo no fui empleado al municipio, sino que mi relación era de prestar servicios. Yo facturaba, como soy ingeniero electromecánico y yo era un poco el que hacía el planeamiento, el proyecto para el Intendente. Pero yo con Alfredo Gruber, nunca trabajé”, aclaró.
Ofuscado por el estado de la situación general que encontró, Zarza atribuyó esos números a la mala administración del intendente saliente. “La dirigencia política tiene que entender que los intendentes y todos los que ocupamos un cargo político somos y tenemos que administrar los recursos de los vecinos y lo tenemos que hacer con total responsabilidad para que no se llegue a estas situaciones. Puerto Esperanza no es el único caso, ayer también charlábamos con el traspaso de mando que se va a vivir un poco más cerca de donde están ustedes, que es en Eldorado, donde se dan muchas irregularidades en el traspaso de mando y estamos hablando de intendentes que cambian, cambian los nombres pero no cambia el partido político. ¿Por qué se dan estas situaciones dentro de la Renovación? Mira, a nivel local se habla de sublemas y nosotros, si bien pertenecemos y pertenezco al Frente Renovador de la Concordia ya nivel provincial, pero cuando uno baja a los municipios son sublemas y es como que son de partidos distintos. Cuando hablamos de sublemas, son sublemas totalmente distintos, tenemos pensamientos totalmente antagónicos, más allá de que también pertenece al nivel provincial a la Renovación”, afirmó Zarza para dejar bien en claro la pertenencia.
Traspaso oficial
“Vamos a hacer el cambio el 11 de diciembre. Ahora, el sábado a la noche comenzamos a ver qué se destinó o no a estos gastos y se hizo, si están lo que corresponde o no (papeles). Lo correcto, cuando uno administra, se tiene un presupuesto y se tiene que gastar o generar en base a su presupuesto”, reflexionó el jefe comunal todavía no en funciones.
Añadió: “No puede exceder tanta cantidad de dinero en base a estas cosas, porque por eso llegan a las malas administraciones, cuando vos gastas más de lo que te ingresa. Entonces, eso es lo que pasa y se traslada estas deudas, que, bueno, obviamente las deudas son del municipio y bueno, vamos a tener que llamar a estos proveedores y si no están las facturas pedirle a ellos para ver cómo podemos solucionarlo y si obviamente se llega a comprobar, vamos a tener que asumir el compromiso pero si no, si no están los papeles, obviamente que no lo podemos pagar”.
Aguinaldos en duda
Zarza precisó que en esta situación de gravedad institucional en la que se encuentra el municipio, con las arcas vacías y con deudas millonarias no podrán encarar los compromisos salariales obligados con los empleados. “En este momento nosotros no contamos con los ingresos, vamos a trabajar para que esto se vea así. Para cubrir el aguinaldo y sueldo, como te dije, el municipio cuenta con mucho personal. Voy a necesitar más o menos 170 millones de pesos. En este momento no lo tengo; pero vamos a trabajar para que esto sea así. Esperanza también, como en todos lados, es un municipio que depende mucho de la coparticipación. La coparticipación es un 60-65% de los ingresos del municipio que anda alrededor de los 100-108 millones de pesos por mes la coparticipación. Hay que ver cómo va. El mes pasado hubo un 18,5% de merma en lo que es concepto coparticipable y tenemos un panorama que viene con una recesión bastante importante y obviamente la recaudación baja y seguramente se bajará también la coparticipación, va a depender de todo esto”, cerró el intendente electo.