El cuerpo legislativo comunal de Puerto Esperanza rechazó el pedido del recientemente asumido Zarza de “declarar la emergencia administrativa, económica y financiera de la Municipalidad de Puerto Esperanza, a partir de la sanción de la presente ordenanza y hasta el 31 de diciembre de 2024”.
Desde www.radioup.com.ar, en comunicación con miembros del Concejo esperanzeño se accedió al contenido de la documentación que fundamenta el pedido de quien habría heredado un municipio en el peor de los estados, de su antecesor Alfredo Gruber.
En el primero de los artículos del proyecto de emergencia, el Ejecutivo solicitaba: “disponer la revisión de las condiciones de la totalidad de los contratos referidos a compras y contrataciones de bienes, servicios, suministros y obra pública, celebrados con anterioridad a la vigencia de la presente Ordenanza, y que se encuentran en curso de ejecución. Las facultades a que se refiere el párrafo precedente implican la posibilidad de suspender, modificar, anular, rescindir o resolver las contrataciones en cuestión, en virtud de razones con oportunidad, mérito a conveniencia, previo dictamen de la Asesoría Legal”.
Entre los fundamentos para solicitar el poder total sobre el camino a seguir en la gestión comunal, Zarza alegaba: “Dada la situación actual en Argentina, marcada por políticas nacionales que parecen inducir futuras restricciones financieras, es crucial anticipar y prepararse para enfrentar posibles impactos a nivel local. Las medidas adoptadas a nivel nacional sin dudas van a generar efectos significativos en las cuentas públicas municipales, afectando tanto la actividad económica como el empleo, lo que podría agravar el ya existente deterioro socioeconómico en nuestra comunidad”.
Antes de que se conocieran las orientaciones de las políticas definidas por el presidente electo, Javier Milei, ya Zarza había adelantado en diálogo con este medio, que el estado de situación que encontró en la Municipalidad era “desastroso”, con maquinaria inutilizadas, un parque vial deteriorado y una caja en cero.
Desequilibrios financieros
Según lo sostiene el intendente en sus fundamentos del texto que finalmente al término de la sesión de este martes no fue aprobada, al asumir se encontró con “graves desequilibrios financieros y una infraestructura vial en condiciones calamitosas. Además, existen deudas considerables con diversos proveedores, lo que agrava la situación financiera del municipio, todo lo cual surge de la propia contabilidad del acta de traspaso de Gobierno firmado por las autoridades electas y del acta notarial de constatación e inventario labrada ante escribano público”.
“Ante este escenario, es imperativo disponer de herramientas excepcionales para revertir el estado actual de la administración municipal y encaminarla hacia la estabilidad financiera y la prestación efectiva de servicios esenciales para la comunidad”, arguye el Ejecutivo en el texto presentado al Concejo Deliberante.
La herencia de su compañero renovador
Días antes de asumir y cuando se ocupaba de conocer la situación del municipio, Zarza había aludido que la herencia de Gruber incluía una deuda de $500 millones y dudaba por entonces si estaría en condiciones de pagar salarios y aguinaldos una vez asumido.
Tal vez a ese punto de la gestión municipal se refiera el artículo 3 de la Ordenanza, cuando sostiene que sería imperioso para el “Departamento Ejecutivo Municipal disponer de todas las herramientas que crea conveniente para la racionalización administrativa, maximizando, la eficiencia y eficacia del uso de los recursos financieros y humanos del Municipio Las decisiones administrativas tomadas con anterioridad a la presente Ordenanza, que no se ajustaren a lo estrictamente AUTORIZADO en les PRESUPUESTOS GENERALES DE CALCULOS DE RECURSOS Y AUTORIZACIONES DE GASTOS y sus modificatorias sancionados por este Honorable Concejo Deliberante, podrá revocadas y eventualmente formular los reproches vía administrativa y/o judicial que correspondieren”.
En el articulado establecido en cuarto lugar, Zarza solicita se autorice al Ejecutivo la facultad de “convenir de común acuerdo la rescisión de la relación laboral mediante el pago de una suma indemnizatoria y/o compensatoria que se pautare, de corresponder, para cada según antigüedad y categoría de cada empleado”.
Voto “no positivo” radical
El concejal radical, electo por Juntos por el Cambio, Darío Chamorro explicó la razón de su voto negativo al pedido de emergencia del intendente Zarza. La única y fuerte razón que sostuvo fue la necesidad de que el jefe comunal realice las denuncias pertinentes sobre las irregularidades detectadas al asumir.
Ante el rechazo del Legislativo, el trámite dormirá en los cajones durante el año en curso y solo podrá volver a ser tratado durante el año legislativo siguiente, en 2025.