Un importante revés judicial sufrió el abogado misionero (32), alias “Luiyi”, luego de que la Cámara Federal de Casación Penal confirmara su prisión preventiva.
Altamirano Marín está implicado en una escalofriante causa que investiga una red de pedofilia, y que también vincula a Marcelo Corazza (52), el ganador de la primera edición de Gran Hermano en Argentina.
Altamirano Marín fue detenido el pasado 11 de abril en Oberá por efectivos de la División Delitos contra Grupos Vulnerables y Trata de Personas de la Policía de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y de Gendarmería Nacional.
El procedimiento fue ordenado por el juez bonaerense Ariel Lijo, titular del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Federal 4.
La causa a la que se vincula a Altamirano Marín es la misma que investiga a Francisco Rolando Angelotti (50), capturado en Oberá en marzo de 2023 y señalado como el líder de la red, con Corazza al frente.

Confirmada la preventiva
La Cámara Federal de Casación Penal declaró inadmisible un planteo presentado por la defensa de Altamirano Marín, con lo cual se confirmó su prisión preventiva.
De esta manera, el alto tribunal ratificó las resoluciones previas que lo señalan como “autor penalmente responsable de los delitos de asociación ilícita en carácter de miembro” y “abuso sexual agravado por haber consumado con acceso carnal”.
Altamirano Marín es el sexto implicado en la causa y el tercero con residencia en Oberá, sumándose a Angelotti y a Leandro Aguiar (26), también vinculado a Angelotti.
El abogado es oriundo de Posadas y al momento de su detención se desempeñaba en la Municipalidad de Oberá, donde había sido contratado en junio de 2021.
En las horas posteriores a su captura, el gobierno obereño lo desvinculó de sus funciones y repudió los hechos investigados, remarcando su “compromiso con la transparencia, la legalidad y con la Justicia”.
Red de explotación
El 20 de marzo de 2023, la detención de Marcelo Corazza, conocido por ser el ganador de la primera edición del reality Gran Hermano en Argentina, generó una gran repercusión en los medios nacionales.
Por la misma causa, se realizaron allanamientos simultáneos en cinco puntos: tres en el partido de General Rodríguez, uno en Tigre (provincia de Buenos Aires), y el restante en Oberá, donde fue capturado Angelotti en su local de “Pizzas Porteñas”, sobre la calle Ralf Haupt.
Además de Corazza y Angelotti, también han sido imputados Raúl Ignacio Mermet (46), Andrés Fernando Charpenet (54) y Leandro Aguiar.
Los cuatro primeros están acusados de haber orquestado una estructura dedicada al reclutamiento de menores y mayores de edad en situación de vulnerabilidad para su explotación sexual, ya sea por dinero o por satisfacción personal o de terceros. Se estima que esta actividad ilícita se desarrolló durante más de 20 años, tanto en Buenos Aires como en Misiones.
En junio del año pasado, el Juzgado Criminal y Correccional Federal 4 elevó la causa a juicio.
Angelotti es señalado como el líder de la banda. Extrovertido y verborrágico, este oriundo de Pilar (Buenos Aires) llegó a Oberá hace casi dos décadas. Sus primeros emprendimientos incluyeron un ciber y panchería en el centro, luego un boliche y, posteriormente, una academia de artes marciales.
Todos estos ámbitos eran, presuntamente, espacios donde se mezclaba con menores y jóvenes a quienes reclutaba. Previamente, residió en Concepción de la Sierra, donde cursó algunos años de sus estudios secundarios. En marzo de 2023, vecinos de Oberá se manifestaron frente al local de Angelotti.
Horror
Se detalla que, al menos entre 1999 y 2003, Angelotti abusó y ofreció los servicios sexuales de dos menores (identificados como Víctima I y Víctima II) en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y la provincia de Buenos Aires.
El expediente cita un escalofriante relato: “En una ocasión, Angelotti llevó a Víctima I a un garaje en el conurbano, había personas de entre 50 y 60 años. El único recuerdo que tuvo es estar arrodillado y todos ellos rodeándolo (supuso que pudieron haberle hecho practicarles sexo oral)”. Ambas víctimas también habrían sido abusadas por Mermet, amigo de Angelotti.
En relación a Corazza, la Víctima I declaró que un día Angelotti le dijo que había alguien que lo quería conocer. Aunque al principio el chico no quería, terminó convenciéndolo y se dirigieron a Plaza Miserere.
Abuso
La Víctima VIII detalló oportunamente el accionar de Angelotti, quien primero actuaba como amigo y protector para luego ir exhibiendo sus verdaderas intenciones, valiéndose de la pornografía. “Mirá, tengo un videíto, tengo esto, tengo lo otro, y bueno, al principio eran esos videos y después era como que ya había una sugerencia. Onda ‘s excitado, eh’. Varias veces se acercaba cuando yo estaba mirando, cuando estamos mirando en la computadora los videos. Venía y como que, no como que, sino que nos tocaba”, declaró la víctima.
La Víctima IX lo conoció cuando tenía 15 años: “En una ocasión me dijo que una persona, pero eso sí me di cuenta que era una persona más grande, como que era mayor, y le debía cierto dinero. Esa persona vivía en otra localidad, como que tenía que estar con esa persona, para que le pagase y demás”.
Obereños explotados en Buenos Aires
Un verano, Angelotti llegó a la quinta de Castelar de la familia de la Víctima II, acompañado por un menor de no más de 9 años con acento misionero. Los tres fueron a un albergue transitorio y tuvieron sexo. La víctima recordó “la colita de bebé” del otro niño.
La explotación sexual de menores también se corrobora con escuchas telefónicas, donde Angelotti le dice a su amigo Charpenet que a “T.” no lo “tiene tan habilitado” para entregárselo, pero a “M.” sí, y le ofrece que, si viajan a Buenos Aires, “él se prende para eso”, en referencia a actos sexuales.
El expediente deja constancia de que los hermanos C. (T. y M.) residen en Oberá, Misiones, pero que al menos M. viajó a la provincia de Buenos Aires en dos ocasiones como mínimo.
En cuanto a Aguiar —posadeño que fue pareja de Angelotti—, se desprende que no desconocía los abusos. Es más, le habría pedido a Angelotti que se filmara mientras los cometía para poder verlos después. Por ejemplo, el 15 de agosto de 2019, Aguiar le habría pedido a Angelotti que sometiera a un menor frente a la cámara para verlo, según una conversación. “Me gusta imaginarme tus violaciones”, le dijo a Angelotti, quien respondió: “A mí me gusta cuando vos lo violás y me contás lo que haces”.
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Fuente: El Territorio