Luego de acordar con el ultraliberal Javier Milei, que el proyecto se trate después de las elecciones, el ministro de Economía y candidato presidencial Sergio Massa envío su propuesta al Congreso. Cree que podrían recortarse gastos tributarios por 2% del PBI para llegar al superávit fiscal.
El Ministerio de Economía presentó este viernes en el Congreso el proyecto de Presupuesto 2024 que incluye una proyección de un dólar a $600 y una inflación del 70%. La proyección que el precandidato presidencial kirchnerista Sergio Massa y su equipo hicieron el año pasado para 2023 había sido de 60%, pero la suba de precios ya superó holgadamente ese porcentaje. Por un acuerdo con el candidato presidencial más votado en las PASO, el ultraliberal Javier Milei, el proyecto no se debatirá sino hasta después de las elecciones. El economista había pedido que el proyecto sea enviado luego de que se definan los comicios generales, lo que implicaría incumplir con la normativa vigente.
De acuerdo con el proyecto de Presupuesto, el oficialismo espera que la economía crezca un 2,7%, con lo que se recuperaría la contracción del presente año, en torno al 2,5%, lo que implica que el país continuaría afectado por la recesión: el crecimiento poblacional vegetativo hace que la economía deba crecer como mínimo, en 2 puntos, para que las personas que ingresan al conjunto de la Población Económicamente Activa (PEA) no se vean afectadas por el desempleo.
Según publicó Infobae, el documento que ingresó por la noche al Congreso de la Nación, también tendrá como proyección preliminar un dólar oficial a $600, un déficit primario de 0,9% del PBI, gastos creciendo por encima de la inflación pero ingresos con un fuerte refuerzo fiscal por la recuperación de recaudación de derechos de exportación, ya sin el efecto de la sequía.
El proyecto de Presupuesto 2024 que incluye una proyección de inflación de 70%, la mitad del ritmo de suba de precios que espera el Poder Ejecutivo como cifra final de 2023: un 135%. En los primeros 8 meses del año, Argentina acumuló una inflación del 80,2%.
Uno de los capítulos salientes del Presupuesto 2024 tiene que ver con las previsiones respecto del tipo de cambio oficial, en un escenario en el que se mantendrían las restricciones al acceso a dólares (cepo cambiario) que determinan la aparición de una brecha cambiaria entre el dólar oficial y las cotizaciones paralelas (dólar blue, contado con liquidación, MEP, turista, etc.)
El proyecto remitido por el quipo económico de Mass, prevé que el cambio oficial estará en 600 pesos. Y que, a fines de este año, terminaría en $367, lo que implicaría una suba respecto de los actuales $350.
Otro de los capítulos relevantes del Presupuesto 2024, acaso, el más importante, es el de la proyección de ingresos y gastos. Sin tomar en cuenta que algunas variables nominales están pensadas y proyectadas con una inflación muy por debajo de las estimaciones privadas, la columna vertebral del texto de ley parece estar en el capítulo fiscal: es que el proyecto incluirá una adenda con un amplio listado de gastos tributarios, que representan para el fisco una pérdida de recaudación de 4,72% del PBI. El Gobierno propondrá a la oposición la eliminación de algunos de ellos para que las cuentas fiscales puedan llegar a nivel de equilibrio.
Así pues, el proyecto de ley de ingresos y gastos habla de un déficit primario del 0,9%, en línea con el acuerdo todavía vigente con el Fondo Monetario Internacional. Sin embargo, el oficialismo plantea en el proyecto, que si el Congreso decide borrar algunos de los ítems del gasto tributario el sector público podría alcanzar, en 2024, un superávit de 1% del Producto Bruto.
Con las exenciones impositivas a magistrados de los Poderes Judiciales nacional y provinciales (0,16% del PBI), Ganancias de asociaciones civiles, fundaciones, mutuales y cooperativas (0,11%), alícuotas reducidas de IVA (0,62%), el régimen de promoción económica para la provincia de Tierra del Fuego (0,33%), entre otros, el fisco recaudaría unos 16,5 billones de pesos.
De los 4,72% del PBI de gasto tributario total, en Economía aseguran que con un 2% del Producto Bruto Interno que pueda realmente recortarse, las cuentas públicas podrían alcanzar equilibrio primario.