La empresa Río Uruguay ya anunció que no se presentará al nuevo pliego de licitación y desde el gremio UTA señalaron a los conductores de colectivos que buscarán que la próxima firma que adquiera las líneas 14, 16, 23 y 28, mantenga el plantel. Sin embargo, hay incertidumbre respecto de si les respetarán la antigüedad a los que acumulan más años de trabajo. Serían 198 trabajadores que están en la cuerda floja, a partir de febrero. La mayoría de los cuales, aún no percibieron sus aguinaldos.
“Tenemos trabajo hasta el 31 de enero”, resumió con crudeza un chofer de colectivos que trabaja en la empresa Bencivenga desde hace más de dos décadas y que como muchos de sus 197 compañeros, no cuentan con certezas sobre lo que ocurrirá con ellos en materia laboral desde febrero, cuando una nueva empresa –posiblemente del Grupo Zbikoski– gane los pliegos de licitación de las líneas concesionadas 14, 16, 23 y 28 (de la empresa Bencivenga), 11 y 26 (de la empresa Don Casimiro)
Fuentes consultadas por Radio Up 95.5 confirmaron que varios de los choferes de colectivos que llevan más de 5 – 10 años de antigüedad en Bencivenga, no saben si continuarán trabajando cuando se defina qué empresa se hará cargo de las líneas cuya vigencia de los pliegos de concesión expiró, y sobre las cuales el Ejecutivo Municipal llamó a licitación conforme a lo previsto a la Ordenanza XVI – 20.
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Lo que temen los choferes que cambiarán de empresa
La salida de la empresa Río Uruguay –que compró a Bencivenga SRL en 2017– del sistema integrado de transporte urbano municipal (Situm), se dio en un contexto económico crítico y en medio de una grave denuncia contra el gobierno provincial por el atraso en el pago de los subsidios nacionales. Esto empeoró la situación de los choferes.
Dado que Río Uruguay no se presentará a la licitación de las líneas, otra empresa adquirirá los servicios que prestan los colectivos 11, 14, 16, 23, 26 y 28 y sus planteles laborales. “Si esto se llega a disolver todo, y Río Uruguay dijo que no se iba a presentar, los tiene que indemnizar a todos. Y el gremio (Unión Tranviarios Automotor) tiene que hacer fuerza para que los choferes sigan trabajando con la nueva prestataria. Después, ya quedaría en la nueva empresa si toma o no toma a los choferes más antiguos”, reveló una fuente consultada al respecto de la situación.
La nueva empresa –se habla de que sería la empresa Z, Next, la misma que ya presta servicios de transporte urbano en Oberá– “puede venir con la idea de tomar gente joven, y nueva. Esto escapa a lo que pueda hacer el gremio, que no puede obligar a la empresa que tome a los choferes de más antigüedad”, confió otra fuente al tanto de lo que ocurre con los trabajadores de Bencivenga.
A los choferes que continúen, si la misma empresa obtiene todas las líneas de colectivos en licitación, podría tocarles trabajar en una línea y horario diferente del habitual, según detallaron fuentes consultadas.
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El silencio de las autoridades y del gremio
En ese contexto, los choferes con más antigüedad, algunos con más de 20 años trabajando para Bencivenga, se acercaron a la empresa para saber qué posibilidades tienen de continuar trabajando y que se les respete los años de servicio. Es un tema crucial, porque con 20 años de antigüedad, un despido injustificado obligaría al pago de una indemnización cercana a los $14 millones. No hubo una respuesta concreta y los choferes temen que la nueva empresa les ofrezca continuar trabajando a cambio de renunciar a su antigüedad.
Desde el Ministerio de Trabajo de la provincia y desde el gremio UTA, que preside el secretario general Horacio Alvez, evitaron hablar públicamente de la situación de estos choferes de colectivos. Tampoco hablan del tema, el ministro de Hacienda de la provincia, Adolfo Safrán, el intendente de Posadas, Leonardo Stelatto y el secretario de transporte de la provincia, René Kegler, todos los cuales fueron denunciados por el apoderado legal de Bencivenga, Juan Manuel Fouce, por el atraso en los subsidios nacionales. La provincia adeudaría 14 meses de subsidios nacionales a R{io Uruguay.
Por lo pronto, hasta la fecha, varios empleados de Bencivenga ni siquiera cobraron los aguinaldos correspondientes al periodo 2023. Todo esto en el marco de un grave incumplimiento por parte de la provincia en el pago de los subsidios nacionales a Río Uruguay.
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Crónica de una muerte anunciada
Según pudo averiguar este medio, la no rendición de los subsidios nacionales a Río Uruguay, fue el catalizador de la decisión de Río Uruguay de abandonar el sistema integrado del transporte de Posadas, el cual será controlado por un único grupo económico –el Grupo Zbikoski– a partir de febrero.
En 2023, Río Uruguay fue perjudicado por Servicios Urbanos SA –una empresa fundada por firmas del Grupo Z– con la no emisión de nuevos plásticos de las tarjetas SUBE Misionero, con la no actualización de los topes de carga de las SUBE Misionero y con la no instalación de lectores QR en colectivos de Bencivenga, lo que impedía el uso de las billeteras electrónicas para el pago de pasajes urbanos.
Antes, las empresas del Grupo Z habían definido que los colectivos de Bencivenga – Río Uruguay no podían ingresar en las estaciones de transferencia de la avenida Quaranta. Ninguna de estas decisiones se pudo tomar sin la anuencia del gobierno provincial y municipal.
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