La reciente intervención del Partido Justicialista (PJ) en Misiones sigue despertando intensos debates dentro del espacio peronista de la provincia.
Lalo Costa Arguibel, integrante del Consejo Federal Nacional del PJ y uno de los impulsores de la medida, dialogó con “La Última Rosca” de Radio Up 95.5 y aseguró que esta acción fue una necesidad impostergable.
“La intervención era un requerimiento a gritos de los compañeros de toda la provincia”, afirmó Costa Arguibel, quien presentó los pedidos de intervención en agosto y noviembre del año pasado. Según explicó, la decisión se tomó para poner fin al manejo discrecional de un pequeño grupo de dirigentes. “Eran cinco o seis personas que utilizaban al partido como un kiosco personal en función de sus necesidades”, denunció.
Un partido en crisis y sin rumbo
Costa Arguibel detalló las múltiples irregularidades que llevaron a la intervención, entre ellas la falta de afiliaciones, la existencia de dos congresos paralelos sin quórum y la designación de un apoderado que ni siquiera era afiliado al partido. También señaló la injerencia del gobierno provincial en las decisiones internas.
“Un secretario general que es un simple congresal provincial fue designado como si integrara el Consejo Político Partidario”, mencionó como uno de los ejemplos del desorden institucional.
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Según el dirigente, el PJ en Misiones viene en un proceso de decadencia desde hace más de una década. “El partido está en caída desde 2013 hasta la fecha”, sostuvo, y destacó la necesidad de una profunda reorganización.
El rol de los interventores y el futuro del PJ
La intervención del PJ en Misiones está a cargo de Gustavo Arrieta y Máximo Rodríguez, dos dirigentes con experiencia en normalización partidaria. “Son grandes compañeros que estarán a disposición para organizar y diseñar la vida institucional del partido”, afirmó Costa Arguibel.
El objetivo ahora, según explicó, es fortalecer al peronismo en la provincia y recuperar su rol histórico. “El PJ no puede ser furgón de cola de un frente provincialista. Es un partido de orden nacional y tiene que ser el eje articulador de un gran frente progresista”, subrayó.
Para lograrlo, una de las prioridades será impulsar un proceso de afiliación masiva. “Se viene un período de reencuentro con los compañeros y compañeras de toda la provincia”, anticipó. Además, se buscará normalizar los consejos políticos municipales y crear nuevas estructuras dentro del partido, como un secretariado de la diversidad y un espacio para los dirigentes de mayor trayectoria.
Con la intervención en marcha y la mirada puesta en las elecciones legislativas y en las del 2027, Costa Arguibel dejó en claro su visión sobre el futuro del peronismo misionero: “Vamos a volver a acrecentar la vida de nuestro partido y a vigorizarlo”.