Cuatro policías detenidos en Loreto iniciaron una huelga de hambre para exigir respuestas del juez Fernando Verón. Denuncian falta de atención a sus pedidos y demoras en el proceso. Sus abogados advierten sobre violaciones a los derechos procesales.
Cuatro policías detenidos en la cárcel de Loreto iniciaron una huelga de hambre para exigir respuestas del juez Fernando Verón. La protesta comenzó el lunes pasado y apunta a la falta de atención del magistrado a las solicitudes de la defensa. Los agentes reclaman la citación de 65 testigos para probar su inocencia.
Los detenidos fueron identificados como Arrieta Alejandro, Arrieta Iván, Guirula Adolfo y Correa Diego. Según sus abogados, el juez Fernando Verón no respondió a los pedidos formales ni concedió audiencias para tratar el avance del caso. Aseguran que la falta de comunicación y la demora en los procedimientos afectan su derecho a la defensa.
En una carta pública, los acusados manifestaron su preocupación por la falta de diálogo con su abogado y la ausencia de reuniones con sus familias. Denunciaron que el magistrado “no da la cara” y que el proceso judicial avanza con irregularidades. El caso generó repercusiones entre los allegados de los imputados y dentro de la fuerza policial. Familiares de los detenidos pidieron celeridad en la causa y garantías de un proceso justo.
Los abogados presentaron reiterados reclamos para que se agilicen las audiencias y se escuchen los testimonios propuestos. Insisten en que las demoras vulneran los derechos procesales de los agentes. Hasta el momento, el juez Verón no se pronunció sobre la medida de protesta ni respondió a los reclamos de la defensa. Se espera una resolución en los próximos días.