Sebastián Jonás M., de 19 años, se entregó voluntariamente ante la Policía en la noche del miércoles, luego de haber sido intensamente buscado por su presunta responsabilidad en la muerte de Jesús Daniel Traico, de 24 años. El trágico episodio ocurrió el pasado 28 de enero en la capital provincial y estaría vinculado a un conflicto intrafamiliar dentro de la comunidad gitana.
Tras su entrega, Jonás M. quedó a disposición del Juzgado de Instrucción Dos de Posadas, a cargo del juez Juan Manuel Monte. En los próximos días, el joven deberá comparecer ante la Justicia en el marco de la causa, en la que además hay otros dos detenidos sospechados de encubrimiento y colaboración en la fuga del acusado.
Según las primeras investigaciones, el origen del enfrentamiento se habría dado por una discusión relacionada con una presunta infidelidad. Según fuentes cercanas a la causa, Jonás M. habría descubierto que su esposa le había sido infiel con un primo de Jesús Daniel Traico, lo que desencadenó un altercado que terminó en un hecho de extrema violencia.
Enfurecido por la situación, Jonás M. se dirigió a la casa de la familia de la víctima en un Peugeot 408 gris, acompañado de su padre y otras tres personas, con la intención de enfrentar al presunto amante de su esposa. Sin embargo, al no encontrarlo en la vivienda, la situación escaló a una batalla campal en la que se utilizaron palos, piedras y botellas.
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Según testigos, Jesús Traico intervino en la pelea con la intención de calmar los ánimos y evitar una tragedia mayor. Sin embargo, minutos después, Jonás M. volvió a la escena al mando del Peugeot 408, ingresó a la colectora en contramano y atropelló deliberadamente a Traico, quien caminaba por la zona entre las calles Amalia Vera y Trípoli.
Familiares de la víctima intentaron socorrerlo y lo trasladaron de inmediato al Hospital Madariaga, pero el joven falleció antes de llegar al centro de salud.
Horas después del hecho, el vehículo utilizado en el atropello fue hallado abandonado en la intersección de las calles Atlántico Sur y 44, y quedó a disposición de la Justicia. Las imágenes de cámaras de seguridad permitieron determinar que el sospechoso había huido en otro automóvil, lo que complicó su captura en los días siguientes.