La bancada oficialista desistió de convocar a una sesión para aprobar 75 pliegos judiciales, entre ellos, el de la jueza que debe definir si van a juicio las causas Hotesur y Memorándum con Irán, en las que la Vicepresidente Cristina Kirchner es la principal acusada. Una senadora del bloque faltó y el rionegrino Weretilneck adelantó que votará en contra de la designación de la magistrada. Los senadores misioneros K, listos para aportar sus votos a la iniciativa impulsada por la jefa del Senado.
El Frente de Todos no pudo reunir los senadores suficientes para abrir una sesión especial este jueves, y aprobar 75 pliegos judiciales, como lo reclama la Vicepresidente Cristina Kirchner. Entre los pliegos en cuestión, se encuentra el de la camarista Ana María Figueroa, una magistrada afín al kirchnerismo que debe definir la suerte de las causas Hotesur – Los Sauces y del Memorándum con Irán. Vale aclarar que la principal acusada de estas causas es Cristina Kirchner, quien logró el sobreseimiento sin la realización del juicio oral, por el voto de dos jueces federales.
El oficialismo desistió de convocar a una sesión para este jueves, en el Senado, en lo que resulta un revés político para la Vicepresidente: la jueza Figueroa cumplirá 75 años el próximo 9 de agosto y debería jubilarse si no consigue que le extiendan su magistratura por otros cinco años. Sólo quedaría una sesión más antes del 9 A, y después de las PASO, dependiendo del resultado, los alineamientos políticos podrían cambiar. No en el caso de los senadores por Misiones, Maurice Closs y Magdalena Solari Quintana: el primero forma parte del bloque del Frente Nacional y Popular que preside el kirchnerista José Mayans -es uno de los dos bloques en los que se desdobló el espacio del Frente de Todos en el Senado-; la segunda es una habitual aliada, que ya estuvo aportando al quorum en el anterior intento del kirchnerismo para aprobar el pliego de Figueroa.
El pasado 12 de julio, el quorum para aprobar los 75 pliegos judiciales no se consiguió porque los senadores Guillermo Snopek y Edgardo Kueider, no bajaron al recinto.
Este miércoles, el oficialismo no pudo siquiera convocar a sesión ante la resistencia de Alberto Weretilneck (Río Negro) y por la ausencia de la senadora por Chaco, Inés Pilatti de Vergara, que se vio obligada a permanecer en su provincia por problemas personales. El rionegrino es gobernador electo y desde su entorno deslizaron que no acompañaría un quórum solicitado por el oficialismo sino hasta después de las PASO del 13 de agosto, y que votaría en contra del pliego de Figueroa.
El rol de Weretilneck
En la anterior convocatoria, Weretilneck tampoco bajó al recinto, pero se especulaba que el rionegrino ya sabía que el Frente de Todos no reunía los 37 senadores que necesita para sesionar, por el faltazo de Kueider y Snopek, que ahora estarían dispuestos a, por lo menos, bajar al recinto y fortalecer el quórum. Pero ahora faltaron Pilatti de Vergara y Wereilneck. En el mejor de los escenarios para el oficialismo, reunirían 36 senadores porque Weretilneck no estaría, o bien, porque votaría en contra del pliego de Figueroa.
Como futuro gobernador, el senador rionegrino está atento a lo que ocurra en las PASO con la posibilidad muy cierta de que el oficialismo sufra una derrota categórica y se vaya licuando su poder. En tal caso, Weretilneck preferiría no tomar decisiones que lo dejen pegado al kirchnerismo, que pasaría a ser la oposición si se da un cambio de gobierno a partir de diciembre.
El pliego de Figueroa es clave para Cristina Kirchner: la jueza es miembro de la Sala I de la Cámara de Casación y su voto es fundamental para determinar si se reabren o no las causas Hotesur y Memorándum con Irán. En la primera de estas causas, están acusados de lavado de activos, además de la Vicepresidente, sus hijos Máximo y Florencia Kirchner -y esta última carece de fueros. En los dos expedientes, los jueces Daniel Obligado y Adrián Grünberg, del Tribunal Oral Federal 5, decidieron sobreseer a Cristina Kirchner sin realizar juicios orales.
Además, Figueroa preside la estratégica Cámara de Casación Penal, que revisa todas las causas federales de tribunales de primera instancia.