En diálogo con el programa “Realidad Mixta” en Radio Up 95.5, Esteban Daniel Antúnez, un vendedor ambulante de Oberá, relató el desalojo que sufrió mientras trabajaba sobre la ruta, en la zona comprendida entre la rotonda de la Ruta 103 y el kilómetro 8, frente al supermercado El Cóndor.
El vendedor expuso su experiencia, que incluyó el desmantelamiento de su puesto y el decomiso de su mercadería por parte de la Municipalidad de Oberá.
Según Antúnez, la municipalidad justificó la medida argumentando que los vendedores ambulantes no pueden ocupar el cordón vial, aludiendo a un permiso de Vialidad para limpiar esa área. Sin embargo, el comerciante señaló lo que considera un trato desigual, ya que asegura que grandes empresas locales también utilizan el cordón vial para estacionamientos y exhibición de productos sin ser sancionadas.
“Nosotros vendemos frutas y verduras para sobrevivir en una crisis bastante importante que afecta a todo el país. Pero la municipalidad nos desalojó a nosotros los puestistas, la gente pobre, mientras los comercios más ricos ocupan el mismo espacio y no les dicen nada”, expresó Antúnez, quien afirmó que su mercadería, gazebos y herramientas de trabajo fueron incautados.
El comerciante también denunció malos tratos durante el operativo. Según relató, incluso un joven que cuidaba un puesto fue sorprendido mientras dormía, y las autoridades lanzaron productos como sandías y melones al camión de la municipalidad. “Levantaron todo lo que había, reventaron los gazebos. Actuaron de mala manera, en uno de los puestos había un chico durmiendo, porque tiene que cuidar la mercadería. El chico se despertó con toda esa gente arrancando las carpas y tirando sandía arriba de los camiones”, señaló.
En cuanto a posibles alternativas, Antúnez explicó que la municipalidad les propuso trasladarse a un terreno, pero cuestionó la viabilidad de esa opción debido a la naturaleza perecedera de los productos que venden. “Necesitamos un lugar con movimiento de gente, porque la mercadería que nosotros vendemos es perecedera, tenemos que vender si o si”, aseguró.
En este sentido, subrayó que tanto él como otros vendedores buscan resolver el conflicto de manera pacífica, pero exigen un trato igualitario. Asimismo, planteó la posibilidad de realizar una protesta simbólica instalando sus puestos en una plaza céntrica de Oberá si la situación no mejora.
“Vamos a ir todos (los puesteros) a la plaza central y vamos a armar una plaza de trabajo ahí. Ellos están manejando precios extremadamente altos a la sociedad y como ellos manejan el precio en la localidad y en sus alrededores, nosotros vamos a ofrecer buenos precios”, indicó Antúnez.
Finalmente, el vendedor remarcó que la competencia desleal y los altos precios de los grandes comercios podrían ser factores detrás de los desalojos. “Ofrecemos precios bajos, y eso molesta. Pero no sabemos hacer otra cosa que trabajar honestamente, somos unos tristes trabajadores y les molesta, es algo insólito”, concluyó.