Así lo aseguró el abogado Gustavo Maldonado, en diálogo con el ciclo “La Última Rosca” en Radio Up 95.5. Además, analizó la actualidad de la ciudad santafesina y destacó el apoyo nacional con las fuerzas de seguridad a la cabeza.
“Parecería ser que en Argentina vive convulsionada. Todas las semanas tenemos un tema en agenda y no un tema menor. Hace demasiado tiempo y quizás esté un poco más enquistado en estos últimos diez años, donde hay diversas banderas políticas”, comentó.
Maldonado indicó que, a su criterio, “no es una cuestión netamente de la política, sino que también tienen mucho que ver las fuerzas provinciales de esa provincia. Dejaron que crezcan distintas bandas y le dieron tan o más poder estando adentro (de las cárceles) que afuera”.
A pesar de ello, resaltó la rapidez con la que el gobierno nacional actuó sobre la ciudad de Rosario: “No es solamente una cuestión de la intendencia de Rosario, sino que el propio Pullaro (por el gobernador Maximiliano Pullaro) tomó la parada de toda la provincia y particularmente en Rosario, y actuó de manera inmediata, junto con el Gobierno nacional, no solamente con un apoyo mediático, sino con un apoyo efectivo”.
Respecto de esta postura de pie de guerra frente al narcotráfico que baja desde la gestión de Javier Milei y se replica a través de Patricia Bullrich y Luis Petri, Maldonado resaltó que “la cuestión de narcotráfico los tomó por sorpresa de alguna manera y por suerte parecería ser que todo el arco político está motivado e impulsado para darle pelea”.
“Hoy, con la aplicación del artículo 27 de la Ley de Seguridad Interior, le dotan a las Fuerzas Armadas para que sean asignados a esta provincia y particularmente a la ciudad de Rosario, para que retomen la paz social”, afirmó.
Además, señaló que “la problemática hoy ya no es mediática, sino que es real, y la verdad es que hay una sociedad que tiene un temor fundado en función de lo que está pasando”.
“No debe ser grato para nadie tener que salir a trabajar y no saber si volvés. A mi entender, el gobierno nos ha demostrado, al menos, cómo deberíamos tratar esta problemática”, agregó.
La posibilidad de una intervención
En la misma línea, Maldonado se refirió al apoyo con el que cuentan las fuerzas de seguridad en este contexto y remarcó que “el respaldo político estaba ya en la época de Macri y ahora actualmente con la misma ministra de Seguridad que se repite, pero el Poder Judicial debería acompañar”.
“En definitiva, ese debate político debe existir, porque si no, volvemos a recaer en el caso ‘Chocobar’, volvemos a recaer en el gatillo fácil y en un montón de otras palabras que, lastimosamente, al tener esas heridas, el país teme dejar en manos de las fuerzas el recobrar la paz”, explicó.
Según Maldonado, “tiene que existir un justo medio en la utilización de la fuerza, en la utilización del seguimiento, de la persecución. Hoy no son las fuerzas armadas de 1980, sino que, tecnológicamente, deberían poder bloquear señales con satélites, escuchar dónde están las personas a la cual quieres atrapar o hacer seguimiento”.
“Si realmente se disponen a hacer bien las cosas, no deberían tener la necesidad de generar un manto de sangre, cuando en definitiva lo que se debe hacer es cesar con las facciones que están existiendo hoy en la venta ya arraigada en Rosario, para que retomen un poco lo que es la paz social”, afirmó.
En cuanto al sistema carcelario, Maldonado indicó que se está trabajando en preparar un sistema contra el narcotráfico en Argentina.
“Desde el Ministerio de Seguridad están impulsando una ley donde justamente lo que se prevé en general es acciones adicionales para la fuerza de seguridad, es decir, que actúen en función de lo que realmente tienen que repeler”, aseguró.
“Si vos ves que hay un sicario que le terminó metiendo un tiro a un chico de una estación de servicio, sí tenés que reducirlo porque no lo puede agarrar, reducilo. Esas acciones adicionales, que, si bien es un tanto genérico, le dota a las fuerzas de seguridad para que si mañana cambian de gobierno y comienzan a ser juzgados, tengan la posibilidad de decir bueno, tuve que actuar en función de esta ley”, explicó.
Además, resaltó que este proyecto de ley que se prevé sea enviado al Congreso, contará con un antecedente en el Código de Italia y con antecedentes en lo que es la ley RICO, una ley utilizada para la corrupción y narcotráfico en Estados Unidos.
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Misiones ¿la nueva Rosario?
Adaptando el prisma crítico a la región, Maldonado señaló que “particularmente en la provincia de Misiones ese tipo de delito no es ajeno. El Alto Paraná es una zona muy caliente del narcotráfico, en zona centro también, pero hay ‘ráfagas políticas’ que lo exteriorizan un poco más y otras veces se callan”.
“Aquí en la provincia estamos reactivando un puerto, con lo cual sería más que positivo que las autoridades locales prevean esta situación que está sucediendo en Rosario, incrementada justamente por los puertos, porque son los lugares de salida del mundo donde el narcotráfico lo mira con muy buenos ojos”, resaltó.
Según el abogado, en Misiones, “no se le presta especial atención, o al menos la justicia federal no presta especial atención a los delitos económicos. No solamente con el tráfico de estupefacientes, sino en lo que también lo vimos tiempo atrás con la soja, el contrabando y demás”.
“Hay toda una red creada estando la justicia federal, la justicia provincial, funcionarios de Aduanas, AFIP y Gendarmería”, afirmó.
“Estamos a tiempo de que, si no están los recaudos necesarios, tomar el toro por las astas, porque dentro de cinco o diez años, la verdad es que si no se hace algo concretamente Misiones va a ser la nueva Rosario porque hoy es una de las tierras más fértiles del narcotráfico”, destacó.
“Estamos hablando no solamente del puerto, sino que está también la frontera seca, siempre tan debatida donde pasa de todo y también la frontera húmeda con Paraguay”.
“No vendría mal en esta nueva etapa política de que también le presten atención a la provincia y a las fronteras de Misiones: Salta está en igual o peor situación que nosotros, Tucumán como un lugar de descanso está en idénticas condiciones y Formosa ni hablar que al tener una frontera similar a la nuestra, con una zona de producción muy grande, lógicamente hay demasiado intercambio”, completó.