La compra de Telefónica por parte de Telecom sacudió el mercado de las telecomunicaciones en Argentina. La operación, que fue calificada como “extraordinaria, inédita, histórica” por el investigador Agustín Espada, representa un nivel de concentración sin precedentes en el sector.
“La empresa resultante, es decir, Telecom, se está quedando con más del 50% de toda la facturación del mercado de servicios comunicacionales y de tecnología”, explicó Espada, director de la Maestría en Industrias Culturales de la Universidad Nacional de Quilmes. Con esta adquisición, Telecom pasa a dominar los servicios de internet fija al hogar, televisión paga, telefonía fija y telefonía móvil, quedando “muy lejos, a mucha distancia de su competencia”.
El impacto en el mercado es claro: “Queda con más del 50% del mercado de banda ancha al hogar, un poco más del 40% del mercado de televisión paga y el 61% de todas las líneas de telefonía móvil que hay en el país”. Según Espada, no hay registros previos de una empresa que concentre tanto poder en telecomunicaciones en Argentina ni en la región.
El rol de Clarín
Uno de los puntos clave de esta operación es el rol del Grupo Clarín, que desde 2017 es el principal accionista de Telecom. “Es el que pone el CEO, es el que comanda la empresa”, sostuvo Espada, detallando que el grupo controla cerca del 40% de la compañía.
Desde el gobierno han señalado que investigarán la compra en el marco de la Ley de Defensa de la Competencia. Sin embargo, Espada aclara que “la operación es legal en el sentido de que no hay nada regulatorio que impida que Telecom compre Telefónica”.
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Lo que sí podría analizarse es si esta concentración afecta la competencia de manera perjudicial. “La Comisión Nacional de Defensa de la Competencia tiene todas las herramientas para decir que es una operación distorsiva de este mercado”, explicó Espada.
El Ente Nacional de Comunicaciones (ENACOM) también podría jugar un papel en la regulación del mercado, pero su capacidad de acción ha sido reducida por la actual administración. “El gobierno ha decidido solamente conformarlo con tres interventores”, explicó Espada, agregando que una posible judicialización de cualquier decisión del organismo “parece bastante sensible”.
Una compra inesperada
Si bien la salida de Telefónica del mercado no es sorpresiva, ya que desde 2019 buscaba vender sus operaciones en América Latina, sí lo es el comprador. “No se imaginaba una operación que concentrara aún más el mercado”, afirmó Espada. Se especulaba con la entrada de un nuevo jugador, quizás de capitales nacionales o de empresarios cercanos al gobierno, pero finalmente fue Telecom quien se quedó con la compañía.
La velocidad con la que se concretó la operación también sorprendió. “La realidad es que el comprador de Telecom es una sorpresa, sobre todo por la velocidad a la que se ha resuelto todo”, concluyó Espada.