Así lo aseguró Gustavo Rohdenburg, presidente de la Unión de Músicos Independientes (UMI), en diálogo con “El País de la Libertad” de Radio Up 95.5, donde además expresó su preocupación y rechazo ante las modificaciones propuestas al decreto que regula los derechos de propiedad intelectual en Argentina.
Estas modificaciones en la Ley de Propiedad Intelectual, según Rohdenburg, afectan directamente a los músicos independientes, quienes dependen en gran medida de los derechos de autor como una fuente de ingresos vital.
Rohdenburg recordó que la UMI ha trabajado intensamente desde su fundación en 2001 para comprender y defender los derechos intelectuales de los artistas independientes. “Para muchos de nosotros, el derecho intelectual es el salario del compositor, del intérprete y del músico”, afirmó, subrayando la importancia de proteger estos derechos en un marco legal claro y efectivo.
Una de las principales críticas de la UMI al nuevo decreto es la ambigüedad con la que se define el uso público y privado de las obras musicales. Rohdenburg explicó que esta falta de precisión puede abrir la puerta a interpretaciones diversas que perjudicarían la recaudación de derechos de autor, los cuales, enfatizó, son fundamentales para la subsistencia de los músicos. “El decreto tiene que ser más preciso en cuanto a definir ámbito público y privado”, insistió.
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Además, Rohdenburg destacó la importancia de las entidades de gestión colectiva, como SADAIC, para la administración y cobro de los derechos de autor en Argentina. Aunque reconoció que hay aspectos que podrían mejorarse en el funcionamiento de estas entidades, defendió su existencia como necesaria para la gestión de los derechos intelectuales. «Es muy difícil cobrar derechos intelectuales sin las entidades de gestión», puntualizó.
En cuanto al proceso de cobro de derechos por parte de los músicos independientes, Rohdenburg detalló que los autores y compositores perciben ingresos cuando sus canciones son interpretadas en vivo, transmitidas en radios o utilizadas en lugares públicos como hoteles y casinos. También mencionó la importancia de los discos, tanto en formato físico como digital, como otra fuente de ingresos, no solo para los compositores, sino también para los intérpretes y productores fonográficos.
Finalmente, el presidente de la UMI llamó la atención sobre la necesidad de actualizar la normativa en relación con la comunicación pública de obras en internet, otro punto que, según él, el decreto aborda de manera insuficiente. «El decreto menciona la comunicación pública en internet, pero no da precisiones», criticó, sugiriendo que se desarrolle una normativa más clara para esta área.
