Un empresario reconocido en Mendoza que denunció a los narcos en sus redes sociales y recibió amenazas fue hallado muerto en su pileta. La víctima fue identificada como Osvaldo Daniel Rofrano, de 63 años, presidente de Gases Aconcagua.
El empresario fue encontrado por su esposa cuando regresó al barrio privado Las Candelas II, en Chacras de Coria. Allí observó el cuerpo de Rofrano flotando en la pileta con precintos en las manos y en los pies.
Osvaldo Daniel Rofrano apareció sin vida en una pileta. Había denunciado amenazas por parte de “líderes narcos y de la trata”.
De manera inmediata dio aviso a las autoridades del exclusivo country, quienes al ver la escena llamaron al 911, motivo por el cual efectivos de la policía y la fiscal de Homicidios, Andrea Lazo, se presentaron en el lugar.
Según se pudo saber, días previos a su hallazgo, el empresario había utilizado sus redes sociales para denunciar amenazas por parte de “líderes narcos y de la trata”.
El periodista de Radio Rivadavia Mendoza, Roberto Louet, en diálogo con Bryan Villalba en el programa “Realidad Mixta” de Radio Up “El empresario apareció muerto, su esposa y la hija de ambos se habían ido a un cumpleaños, cuándo volvieron lo encontraron en la pileta. Era un hombre muy activo en redes sociales”.
El periodista aclaró que si bien se investiga un suicidio, lo que más llama la atención es que el cuerpo del empresario fallecido tenía precintos en las manos y en los pies, “la policía investiga todo lo que ocurrió, en la garita de seguridad de barrio no hay otro ingreso más que el de su esposa y la menor, pero la presencia de los precintos en el cuerpo puede indicar más cosas”.
“El empresario era muy activo en redes sociales, y justamente su última publicación es la que dispara la investigación y la que genera más ruidos en relación a la muerte de Rofrano”, dijo Louet.
“Ante las amenazas recibidas por tucumanos, aclaro: no me voy a suicidar. Cualquier daño que se produzca a nuestra familia y/o empresa, responsabilizo a los mafiosos líderes narco y de trata que pretenden amedrentar a los que ponemos la vida para seguir generando trabajo y dignidad…”, señala la publicación del empresario fallecido.
Pese a que los investigadores tienen diversas hipótesis, llama la atención que en dicha manifestación pública sostuvo que no se iba a suicidar.
Aun así, los investigadores explicaron que las cámaras de seguridad de la vivienda no registraron el ingreso de terceras personas y a su vez, aunque apareció atado con precintos, los mismos estaban desajustados por lo que creen que se trataría de un suicidio.
Hay conmoción en el barrio privado y la localidad ya que, según medios nacionales, el propio empresario le había contado al intendente Esteban Alasino sobre las presuntas amenazas.