El sector yerbatero de Misiones se encuentra en estado de alerta tras una reunión autoconvocada en la localidad de Campo Grande, organizada por el grupo Impulso Yerbatero, donde productores de distintas localidades debatieron sobre los costos de producción y la situación crítica del sector. En el encuentro, participaron pequeños productores, representantes de secaderos y cooperativas de toda la provincia, además de algunos de Corrientes.
Jorge Skripczuk, productor yerbatero y uno de los principales referentes de la convocatoria, dialogó con “Realidad Mixta” de Radio Up 95.5, donde expresó su malestar por la falta de respuestas por parte del Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM), que no presentó una grilla de costos actualizada.
“Habíamos hecho un pedido formal a los directores que representan a la producción dentro del Instituto para trabajar en una grilla de costos de manera conjunta. Lamentablemente, no nos brindaron ningún tipo de información”, comentó Skripczuk.
La reunión fue vista como un esfuerzo por unificar criterios sobre los costos de producción, especialmente en un contexto donde los insumos han aumentado considerablemente, mientras que el precio de la yerba no ha acompañado esa tendencia.
“Queríamos trabajar de manera conjunta con el INYM para tener un costo aproximado y único, pero no fue posible”, lamentó Skripczuk, quien confirmó que varios productores salieron “bastante insatisfechos” del encuentro.
El productor también destacó la importancia de contar con datos precisos para enfrentar la próxima cosecha, programada para diciembre. En ese sentido, advirtió que “en esta situación es imposible arrancar con la zafriña. Mientras el productor no tenga un mínimo de rentabilidad, no vamos a permitir circular yerba”.
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Además, Skripczuk explicó que la situación es especialmente preocupante para los pequeños productores, quienes se ven gravemente afectados por la falta de regulación de precios y las modalidades de pago diferido, que implican recibir apenas 47 pesos por kilo de yerba en un esquema de pagos a 60, 90 y 120 días. “Es una locura, el productor está totalmente desprotegido”, afirmó.
Por otro lado, Skripczuk resaltó la importancia de la organización dentro del sector. En 2021 fundó el grupo Impulso Yerbatero, una asociación de productores que busca representar a los pequeños productores y tener voz en las mesas de concertación. “Queremos contar con personería jurídica lo antes posible y representar a la mayoría de los productores que quieran sumarse a esta causa”, explicó.
A pesar de las dificultades, Skripczuk mantiene una postura abierta al diálogo, aunque enfatizó que si no se logran avances, podrían tomarse medidas más drásticas. “Apostamos siempre al diálogo, pero si no hay respuestas, vamos a tener que tomar alguna medida más firme”, adelantó, aludiendo a la posibilidad de no iniciar la próxima cosecha si las condiciones no mejoran.
Finalmente, Skripczuk apuntó que la situación actual afecta no solo a los productores, sino también a toda la comunidad yerbatera, desde almaceneros hasta consumidores. “Es difícil la situación, pero agradecemos que se preocupen por dar a conocer lo que está pasando hoy en día”, concluyó.