Sergio Ortíz (50), conocido con el alias de “Bin Laden” o “Chiquito”, es un expolicía y exconvicto con un largo accionar delictivo. Le pidió techo y comida a la víctima a cambio de hacer changas.
Uno de los sujetos más buscados en la provincia y la región por estas horas es Sergio Gastón Ortíz (50), alias “Bin Laden” o “Chiquito”. Está acusado de descuartizar a quien sería Marcos Adalberto Martínez (46) en un inquilinato del complejo habitacional A4, al sur de Posadas.
El cadáver desmembrado con una amoladora, en avanzado estado de descomposición y dentro de bolsas de polietileno, fue hallado el pasado sábado a la madrugada dentro de una heladera en la mencionada propiedad, ubicada sobre la avenida Juan Manuel Fangio.
Aún resta la confirmación del análisis genético de ADN para determinar fehacientemente la identidad del hombre asesinado.
Acerca del nombre del sospechoso, se supo que surgió de inmediato por testimonios que lo mencionaron como muy próximo a Martínez en los últimos meses.
El prontuario de «Bin Laden»
Con un frondoso prontuario que se inició en 2003, con el asalto a mano armada a un empresario en Posadas, se cree que últimamente se ganaba la vida como prestamista. Le habría pedido alojamiento y comida a cambio de hacer changas a la víctima, a quien habría decidido matar por dinero, según una de las conjeturas.
Por ello, la principal hipótesis del homicidio para los investigadores sigue siendo el robo, debido a que aún no aparece una caja fuerte portátil y la motocicleta que eran del fallecido.
Las mascotas que tenía la víctima ladraron toda la noche a un tanque de agua, por lo que la policía revisó el lugar. No hallaron nada y crecían los rumores de que aún no fueron halladas todas las partes del cuerpo.
Lo que alertó a familiares de Martínez fue el olor a putrefacción que emanaba de una de las viviendas que alquilaba sobre la avenida 186 (Fangio) entre las calles 53 y 53B.
Allí y una vez en la escena los efectivos encontraron bolsas dentro de una heladera. Había enorme cantidad de larvas, gusanos y moscas, que ahora servirían para una pericia que indique el tiempo del óbito en ese lugar.
A las 3 del sábado se hizo presente para orientar la labor de los policías el juez de Instrucción 6, Ricardo Walter Balor. Por el estado de descomposición de los restos, éstos fueron trasladados a la Morgue Judicial de Posadas para que los integrantes del Cuerpo Médico Forense del Superior Tribunal de Justicia intenten determinar la causa de muerte y la herramienta para cortar el cadáver.
El cuerpo estaba dentro de una heladera a la que quitaron todas las bandejas y estantes para que quepan los restos.
Un viejo integrante del hampa
Mientras era miembro de la Policía de Misiones con el grado de agente, “Bin Laden” fue relacionado a delitos importantes. En pocas palabras, habría participado de robos junto a otros por entonces también policías locales conformando bandas.
El miércoles 5 de marzo de 2003 a la noche, fue arrestado por su presunta participación en el secuestro de un empresario español y su pareja en Posadas. Las víctimas fueron abordadas en su domicilio de la avenida Almirante Brown y Zabala. Tras una persecución cayó la banda y fue rescatado el matrimonio.
Al año siguiente fue involucrado en otro atraco, esta vez a un local comercial situado en la calle Ambrosetti, a escasas cuadras de la avenida Uruguay. Por aquel entonces, también fue mencionado como posible integrante de una banda que meses antes concretó un golpe comando al Círculo de Oficiales del Ejército de Mendoza, sustrayendo un botín de casi medio millón de pesos.
El domingo 26 de abril de 2009 a las 6.45, intentó asaltar al dueño de un complejo nocturno cuando éste llegaba a su casa, alrededor de las 6.45, en compañía de su pareja. Fue sobre la avenida Santa Cruz, a pocas cuadras de la intersección con 115 de Posadas. Los reflejos de la víctima, que aceleró a fondo su Honda Civic cuando se percató de que pretendían asaltarlo, frustró el plan de los criminales, que se dieron a la fuga con las manos vacías.
Por ese ilícito, “Bin Laden” fue sentenciado a cumplir seis años de cárcel. Dicha medida judicial fue a finales de septiembre de 2011 y durante un juicio abreviado en el cual reconoció su culpabilidad.
Tras una larga ausencia al menos de los titulares de los diarios, el expolicía volvió a ser noticia el jueves 15 de septiembre del año pasado, cuando la policía correntina vinculó a “Bin Laden” y a otros dos sospechosos a robos de dinero a punta de revólver sucedidos en dos supermercados, un centro de cobro de servicios y un lubricentro de la capital de esa provincia. En cada uno de los hechos existió cierta planificación y con una metodología de despiste.
Esto no es un detalle menor. Al ser exintegrante de una fuerza de seguridad, el presunto descuartizador del A4 sabe cómo eludir a la policía y no dejar rastros.
Creen que ahora podría estar en Corrientes, donde tendría familiares y amistades vinculadas al mundo de la delincuencia y que lo podrían ocultar durante un tiempo.
Las sospechas del descuartizamiento
Por el estado del cadáver, se cree que la data de muerte coincidiría con el día de denuncia de la desaparición de Martínez, presentación que realizó su pareja en la comisaría Undécima de la Unidad Regional X, jurisdicción de A4. Pero los rastros forenses podrían estirar la presunción a 21 días o tres semanas.
En el lugar del hallazgo trabajaron integrantes de la Dirección Policía Científica. En tanto que acompañó al juez Balor el fiscal de Instrucción 6, René Germán Casals.
Entre los elementos secuestrados, se destacó una amoladora que estaba enchufada a la corriente eléctrica y manchada con sangre, dos cuchillos, uno dentado de cocina y uno de fabricación artesanal de 45-50 centímetros de largo tipo puñal con doble filo, de los confeccionados habitualmente con restos de elásticos de suspensión de automóviles (tenían manchas escarlata y estaban próximos al colchón donde se presume fue descuartizada la víctima).
La policía buscaba la motocicleta en la que se movilizaba Martínez y en la que habría sido visto “Bin Laden”.
Fuentes del caso indicaron que al parecer el sospechoso obtenía recursos económicos a través de préstamos de dinero fuera del marco legal y posiblemente enmarcado en la usura y la violencia para los cobros.
(Fuente: Primera Edición)