El secretario general del Sindicato Único de Trabajadores de Seguridad de Misiones (SUTRAS), Sergio Soria, dialogó con “El País de la Libertad” de Radio Up 95.5 y se refirió a la situación que atraviesan los trabajadores de la empresa Mega Seguridad en Misiones, quienes denuncian una precarización del sector y exigen la intervención del Ministerio de Trabajo.
Y es que a raíz de esta situación, el sindicato emitió un urgente llamado al Ministerio de Trabajo provincial para que intervenga ante los reiterados incumplimientos del convenio laboral por parte de la empresa MegaSeguridad, que presta servicios en organismos estatales. Esta situación afecta a miles de trabajadores que, a pesar de estar regulados por un convenio colectivo, reciben salarios muy por debajo de lo que les corresponde.
En este sentido, Soria señaló que la situación es casi insostenible: “La situación de todos los trabajadores de la provincia de Misiones es paupérrima. Estamos casi todos prácticamente bajo el índice de indigencia”, reveló.
Este escenario se agrava para los empleados de MegaSeguridad, quienes deberían estar percibiendo un salario cercano a los $800.000 netos por 8 horas de trabajo, según lo estipulado en el convenio colectivo. Sin embargo, Soria denunció que estos trabajadores apenas reciben entre $250.000 y $260.000 por jornadas laborales que, en muchos casos, superan las 250 horas mensuales.
“Estamos hablando de un cuarto de lo que les correspondería, sin contar las horas extras”, subrayó Soria, y explicó que esta problemática no es exclusiva de MegaSeguridad, sino que se extiende a otras empresas de seguridad que operan principalmente en dependencias públicas. “La provincia, a través del Ministerio de Trabajo, no actuó a pesar de las numerosas denuncias. Nos dicen que no pueden molestar a las empresas que trabajan para el Estado porque el Estado paga tarde. Pero ese no es un problema de los trabajadores”, enfatizó.
El sindicato ya presentó más de 100 notas reclamando una intervención eficaz del gobierno provincial, pero, según Soria, no recibieron respuestas satisfactorias: “Siempre nos dicen lo mismo, se sonríen, pero con eso los trabajadores no comen, no llegan a fin de mes”.
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La falta de acción generó un profundo malestar entre los trabajadores, especialmente ante la percepción de que los vínculos políticos influyen en la inacción gubernamental. “No estamos enfrentando a un empresario común y corriente, estamos enfrentando a un aparato político”, denunció Soria, destacando que las conexiones entre los directivos de MegaSeguridad y figuras políticas locales dificultan la resolución del conflicto.
Otro de los reclamos recurrentes es la falta de refugios para los trabajadores de seguridad que se desempeñan en áreas barriales durante la noche, especialmente en condiciones climáticas adversas. “Eso corresponde directamente a la empresa, pero muchas veces los trabajadores no denuncian por miedo a perder su única fuente de ingresos”, explicó Soria, quien también mencionó la complejidad de llegar a localidades más pequeñas donde la precarización es aún mayor.
Con más de 4.000 trabajadores en el sector, la mayoría de ellos en condiciones de vulnerabilidad económica, el sindicato insiste en la urgencia de que el Ministerio de Trabajo haga cumplir las leyes laborales vigentes. “Mientras el gobierno no termine con el nepotismo y el tráfico de influencias, no vamos a lograr mejoras para los trabajadores”, concluyó Soria.
