La seguridad informática es un tema de creciente relevancia en un mundo donde la información personal y los datos sensibles se encuentran cada vez más expuestos. Para arrojar luz sobre la manera en que las personas pueden protegerse mejor, “El País de la Libertad” de Radio Up 95.5 dialogó con Alejandro Bogado, desarrollador de software, quien compartió importantes consideraciones sobre cómo manejar la información personal y la necesidad de contraseñas seguras.
En primer lugar, Bogado señaló la importancia de la autoprotección en línea: “Principalmente hay que hacer mucho foco en la protección personal de cada uno, cuidar la información y saber que no estamos exentos de sufrir ataques”. Esto desmiente la idea común de que los ciberdelincuentes solo se dirigen a personas con grandes cantidades de dinero o información confidencial.
“Hoy no es un atacante específico contra una persona, sino que ya son bots que encuentran estas bases de datos”, explicó, refiriéndose a cómo los atacantes automatizan la búsqueda de objetivos a través de herramientas como el phishing.
Un aspecto fundamental de la seguridad en línea es la creación de contraseñas sólidas y adecuadas. Según Bogado, el uso de patrones para desbloquear dispositivos es una práctica obsoleta, especialmente en el caso de los teléfonos Android: “Hoy en día está bastante hackeado ya el sistema en Android de cómo poder ingresar a través de patrones”.
En cambio, recomienda utilizar un PIN de al menos seis dígitos o una contraseña más compleja que sea fácil de recordar. “Evitar siempre usar información personal para las contraseñas. Eso es algo súper fundamental”, afirmó, sugiriendo que, en lugar de utilizar números de documentos o fechas de nacimiento, se deberían mezclar caracteres y símbolos para hacerlas más seguras.
Sobre este punto, destacó la importancia de no subestimar los riesgos que implican datos aparentemente inofensivos. “Aunque uno no tenga plata, puede sacar crédito a tu nombre”, explicó, poniendo de relieve cómo los ciberdelincuentes pueden aprovechar la información de historial crediticio limpio para cometer fraudes.
Por otra parte, Bogado se refirió a la exposición de datos personales en redes sociales. Con los avances en inteligencia artificial, Bogado advirtió sobre los riesgos que esto implica: “Hoy la información personal de uno está más pública que privada”, subrayó.
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En este sentido, relató un caso impactante presentado en un video de una organización alemana, donde un atacante utilizó fotos públicas de una niña en redes sociales para crear un perfil de ella como adulta, utilizando inteligencia artificial para generar imágenes explícitas. “La niña nunca eligió o nunca tuvo la posibilidad de decidir si querían postear o no las fotos”, agregó, alertando sobre los peligros del “sharenting” (compartir fotos de menores en internet).
Además, Bogado también mencionó las nuevas generaciones y su relación con la identidad digital, comentando sobre cómo en algunos países, como Corea del Sur, los jóvenes eligen crear perfiles temporales para reducir la recopilación de sus datos. “Ellos mismos eligen borrar las cuentas año a año para evitar que se recopilen datos”, explicó, resaltando una tendencia cultural impulsada por la necesidad de protegerse en un entorno digital cada vez más invasivo.
En cuanto a las acciones del Estado frente a la ciberseguridad, Bogado reconoció que si bien se han hecho avances, los ataques a nivel institucional han sido devastadores: “Desde más o menos 2015 hasta acá aumentó notablemente el ataque al país. Lo vimos con el Renaper”. De hecho, mencionó un sitio web público donde las personas pueden verificar si su información ha sido comprometida tras ciberataques a organismos gubernamentales: “MeFiltraron.com es una base de datos pública donde vos podés poner tu correo electrónico o incluso poner organismos”.
Finalmente, Bogado expresó su postura sobre la reciente presencia de la empresa WorldCoin en Posadas, una compañía que realiza escaneos de iris a cambio de criptomonedas. “Jamás me escanearía el iris”, dijo enfáticamente, advirtiendo sobre los riesgos de compartir datos biométricos sensibles con una empresa privada: “Esa es una información súper sensible que puede ser utilizada de cualquier manera. No es algo que vos podés borrar o cambiar”.
