Así lo aseguró Matías Pamberger, presidente de la Sociedad Rural de Misiones, en diálogo con Radio Up 95.5. Además, expresó su preocupación por lo que considera una medida “autoritaria y sin fundamento” por parte de la provincia.
El gobierno provincial continúa defendiendo la Ley de Bioinsumos, la cual promueve el uso de productos orgánicos y prohíbe el glifosato y otros herbicidas químicos, pese a estar aprobados por el Senasa y la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) norteamericana. En ese marco, el exgobernador Oscar Herrera Ahuad primero en un diario y el presidente del IMAC, Roque Gervasoni después -este martes, en Radio Up 95.5- criticaron a quienes se oponen al reemplazo compulsivo del glifosato por los bioherbicidas aún no aprobados por el Senasa. Este miércoles, Pamberger replicó en duros términos al funcionario provincial, a quien acusó de faltar a la verdad e imponer una forma de producción de altos costos para los colonos, sin ningún tipo de diálogo con el sector.
“Estamos muy preocupados por el tema. Ayer cuando escuchábamos a este señor Gervasoni, que la verdad que no es creíble para nada. O sea, cada vez nos estamos preocupando más, porque vemos que vamos hacia un autoritarismo que no hace falta. Creo que si vos tenés un producto que funciona, que sabés que va a funcionar, ¿para qué querés prohibir otro? Me parece que es algo totalmente irracional”, manifestó Pamberger, en diálogo con el programa “El País de la Libertad”, por Radio Up 95.5.
En cuanto a la efectividad de los bioinsumos que produce la empresa AgroSustentable en la biofábrica de Posadas, que el gobierno provincial está repartiendo en chacras misioneras como sustituto de los herbicidas, insecticidas y fertilizantes químicos, Pamberger advirtió que algunos colonos ya han comprobado en la práctica, que no funcionan e incluso, daña la microfauna de los suelos.
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“Hay productores que lo están ocupando, sabemos que no funciona, o sea, no mata nada. Es más, se lo hacen poner ahora que es invierno. Y claro, se lo hacen poner antes de las heladas, te cae una helada y dicen después que el herbicida es el que el que mató el pasto (malezas), que mató la pastura y no, lo que mató fue la helada. Y después vemos que, bajo la tierra, por ejemplo, mata a todos los microorganismos que hay. O sea, eso es muy preocupante, la verdad que eso sí que es muy preocupante”, subrayó el productor.
Consultado por la falta de diálogo con el gobierno provincial, que aprobó en la Legislatura la ley VIII – N° 103, sin consenso con los productores, Pamberger fue lapidario: “sabemos todos que es un gran negociado. Ellos no pueden salir a entregar este producto (Bioherb, de la empresa AgroSustentable), en la provincia para que se ocupe, más allá de que ya lo están regalando, por no estar aprobado por SENASA. Al no estar aprobado por SENASA, hay una ley que dice que, en la provincia de Misiones, en la Constitución, que esos productos no se pueden ocupar ni entregar en la chacras”, denunció el dirigente de la SRA.
“O sea, yo creo que el productor no es un conejito de indias para que esté ocupando estas cosas. La verdad que es preocupante esto. Yo no sé si esto va a terminar. Ojalá que lleguemos a un acuerdo. La verdad que fuimos a la Cámara (de Representantes), no nos atendieron”, recordó Pamberger, sobre la sesión en la que un diputado presentó un pedido de reforma de la norma y el puñado de representantes de los productores no pudieron ingresar a la Legislatura.
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En tono crítico hacia el gobierno, Pamberger apuntó: “Después tenemos que aguantarnos de que el vicegobernador (Herrera Ahuad) nos salga a patotear por el diario, porque claro, en el diario él puede decir lo que él quiera. Pero frente a frente a los productores, baja la cabeza y se esconde. O sea. La verdad que es una falta de respeto hacia lo hacia la gente que le está pagando el sueldo, porque si la gente deja de producir en Misiones, ¿de qué ellos van a vivir? ¿Con qué se van a cobrar el sueldo?”, retrucó Pamberger.
Respecto del cambio en la forma de producción que plantea la provincia, imponiendo los bioinsumos que tarde o temprano deberán ser adquiridos a AgroSustentable, Pamberger resaltó que conllevan un enorme incremento en los costos, por la necesidad de contratar más personal en las chacras. “El glifosato sólo se tira cuando la maleza está muy alta y tiene una duración de seis meses, no tres meses”, sostuvo Pamberger, insistiendo en que los bioherbicidas deben emplearse cada dos semanas y esto implica “un costo muy grande.”
“Hoy los yerbateros con el precio que le están pagando, no le cierra los números. Imagínate que tienen que hacer este trabajo. Si al señor Roque (Gervasoni) ‘vos tenés que tener cinco personas trabajando dentro de tu casa en vez de una’. O sea, él va a saltar y va a decir: ‘no, no puedo pagar los costos’. Y bueno, nosotros tampoco podemos pagar los costos de tener tanta gente trabajando y tanto tiempo en el campo”, explicó el productor y dirigente agrario.
Por último, Pamberger abordó la cuestión de la salud, es decir, la principal crítica del gobierno provincial al empleo de los herbicidas químicos. “Hubo problemas con el glifosato, porque llevaba un tipo un fosforado, que hoy por hoy, y eso se fue mejorando. Es más, en Europa se volvió a darle diez años más de uso, así que creemos que esto no tiene problema. Sí, hay que ocuparlo como corresponde”, insistió el productor, apuntando a la mala dosificación y a la falta de elementos de seguridad al momento de la aplicación. “Hay que hacer docencia en la provincia, que eso falta mucho”, sentenció.
