El pasado 17 de octubre se llevó a cabo una reunión clave en la Escuela Normal Mixta de Posadas, donde representantes del Gobierno Provincial y la Mesa Salarial Unificada se sentaron a dialogar sobre la situación salarial docente.
La mesa, integrada por organizaciones como FTEL, AUTOCONVOCADOS 100%, MPL, y ATE, tenía la esperanza de recibir noticias alentadoras sobre una posible recomposición salarial. Sin embargo, tras dos horas de conversaciones, el gobierno anunció que no habrá aumentos salariales durante el mes de octubre.
Este anuncio cayó como un balde de agua fría para los trabajadores de la educación, quienes venían aguardando con expectativas un alivio ante la difícil situación económica que enfrentan. Desde la mesa se expresó que cada docente, con su dedicación y sacrificio diario, esperaba una respuesta positiva que ayudara a mitigar la pérdida del poder adquisitivo que sufrieron durante 2023.
“No hemos encontrado otra cosa más que promesas incumplidas”, fue una de las frases más resonantes de los representantes de los trabajadores, quienes señalaron que este nuevo desplante se suma a los desencuentros de meses anteriores. El compromiso asumido en junio de un “aumento sustancial” que jamás llegó, y los acuerdos que prometían que no habría persecuciones contra los docentes que manifestaran su descontento, quedaron, según indican, en el olvido.
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Como respuesta inmediata y consensuada entre todos los sectores que conforman la Mesa Salarial, se decidió llevar adelante un paro de 24 horas el próximo miércoles 23 de octubre. La medida de fuerza incluirá la no asistencia a los lugares de trabajo y acciones de visibilización en diferentes puntos de la provincia. En Posadas, la concentración está prevista para las 9:00 en la Plaza 9 de Julio, donde se espera una gran movilización.
El descontento es profundo, y los gremios no escatiman en señalar la actitud del gobierno provincial. “El Gobierno está empecinado en hacer pasar este ajustazo a como dé lugar”, denuncian, acusando al Ejecutivo de avanzar con medidas represivas, judicialización y persecución a los trabajadores. Los gremios también manifestaron su rechazo a lo que consideran prácticas antidemocráticas y una falta de respeto a los derechos constitucionales.
El paro del 23 de octubre será una jornada clave para los docentes de Misiones. La convocatoria, firme y contundente, llama a los trabajadores a no quedarse de brazos cruzados y a traducir el enojo en acción. La Mesa Salarial Unificada espera que la medida de fuerza logre visibilizar las demandas del sector y que el gobierno provincial tome cartas en el asunto.
“Si el gobierno quiere resolver esto, que aparezca una propuesta y avancemos en una solución concreta”, afirmaron los representantes docentes, dejando claro que no se conformarán con promesas vacías.
