Entre las decisiones estratégicas para paliar la situación, se destacan la creación del Fondo Educativo Provincial y las retenciones para el sostenimiento del Instituto de Previsión Social (IPS), las cuales generan preocupación en las comunas.
En diálogo con Radio Up 95.5, Carlos Sartori, presidente de la Comisión de Desarrollo Estratégico e Integral de Municipios (CODEIM) y actual intendente de Campo Grande, brindó detalles sobre las medidas adoptadas por la provincia de Misiones que impactarán en los recursos coparticipables destinados a los municipios.
Sartori explicó que la provincia utilizará parte de los fondos coparticipables para financiar el Fondo Educativo Provincial, con el objetivo de sostener los recursos educativos ante la falta de fondos nacionales. “Esto quiere decir que mes a mes estarán quitándose de la coparticipación alrededor de mil millones de pesos que irán al Fondo Educativo Provincial”, afirmó.
Este redireccionamiento impactará directamente en los recursos que reciben los municipios. “En el caso del municipio de Campo Grande, por ejemplo, en enero de 2024 tuvimos una merma de 15 millones de pesos, lo que representó aproximadamente un 10% de la coparticipación total”, detalló Sartori.
Otra medida que afecta las finanzas municipales es la decisión de garantizar un sueldo básico mínimo de 90 mil pesos para los agentes municipales en toda la provincia. Según Sartori, esto implica retenciones adicionales que también afectan la coparticipación. “La mayoría de los municipios no tiene básicos altos. Ahora, a partir de enero, habrá una retención por parte del IPS para aquellos agentes que no llegaban a este mínimo”, señaló.
Aunque estas medidas no modifican directamente los salarios de los empleados municipales, Sartori advirtió que sí impactan en los ingresos coparticipables de los municipios: “De diez que antes venían, ahora seguramente recibiremos ocho”.
El presidente de CODEIM enfatizó que estas reducciones generan incertidumbre en los municipios, muchos de los cuales ya enfrentan limitaciones financieras. “Prácticamente la obra pública está paralizada en todos los municipios de la provincia”, afirmó. Sin embargo, destacó la capacidad de los intendentes para encontrar soluciones: “Cada jefe comunal verá cómo ajustar en algunas cuestiones. Sé de la fuerza de voluntad y el optimismo de los intendentes para seguir adelante”.
Sobre la posibilidad de aumentar las tasas municipales como alternativa, Sartori fue contundente: “No es un camino. Al contrario, los municipios del interior tienen tasas muy bajas. Siempre estamos buscando que el contribuyente pague lo menos posible y podamos generar más acciones que beneficien a la comunidad”.
En un contexto donde los municipios ya enfrentan desafíos económicos, estas medidas suponen un esfuerzo adicional para las gestiones locales. Según Sartori, la clave estará en priorizar las necesidades más urgentes: “Los intendentes se ingenian para encontrar soluciones que respondan a las demandas diarias de los vecinos”.
El impacto de estas decisiones afectará a los 78 municipios de la provincia, 53 de los cuales están nucleados en CODEIM. A medida que avanza el año, los intendentes deberán afrontar la tarea de gestionar con menos recursos y buscar alternativas para mantener los servicios esenciales. “Será una situación compleja, pero los intendentes tienen la voluntad de seguir adelante y buscar beneficios importantes para los misioneros”, concluyó Sartori.