La muerte de Lucas Escalante, un joven que permaneció diez días detenido en la comisaría de Concepción de la Sierra, desató una pueblada en las últimas horas, bajo el clamor de justicia. Vecinos y familiares denunciaron maltratos sufridos por el joven mientras estaba bajo custodia policial.
En medio del dolor, José Escalante, padre del joven, dialogó con “El País de la Libertad” de Radio Up 95.5 y brindó su testimonio que expone el drama de la violencia institucional.
“Me cortaron de pie, me cortaron la fe. No tengo un peso para pagar una nueva autopsia, pero quiero saber la verdad”, declaró con la voz quebrada. Según su testimonio, el cuerpo de su hijo presentaba signos claros de violencia: “Está todo golpeado mi hijo, tiene marcas en la espalda, la nariz quebrada, lleno de moretones”.
La familia solicitó una segunda autopsia para esclarecer las causas reales de la muerte. La versión oficial indica que Lucas sufrió un paro cardiorrespiratorio, pero José cuestiona esta conclusión: “Cómo va a ser un paro si está lleno de golpes. Esto no puede quedar así”.
Durante los diez días que su hijo permaneció detenido José denunció que el joven estuvo incomunicado y sometido a condiciones inhumanas. “Siempre había una excusa para que no pudiera hablar con mi hijo”, aseguró. Además, relató un episodio que muestra el trato degradante que recibió Lucas: “Tengo testigos que dicen que le llevaban la comida y se la tiraban como si fuera un perro”.
Sobre la relación de Lucas con los policías implicados, José señaló directamente a uno de los oficiales, a quien acusa de tener antecedentes de violencia contra su hijo. “Eso fue una venganza de dos de los policías. Ellos lo mataron a mi hijo”, afirmó.
El pueblo de pie
El velorio de Lucas se convirtió en el epicentro de una manifestación masiva. “Mi hijo despertó al pueblo”, dijo José sobre el acompañamiento de vecinos y amigos. Durante la tarde, una movilización se dirigió a la comisaría local para exigir explicaciones, pero no obtuvieron respuestas. “Ni el intendente, ni la policía, nadie se acercó a darnos una palabra. La justicia brilla por su ausencia”, lamentó.
Por otro lado, Hugo Humeniuk, intendente de Concepción de la Sierra, también dialogó con “El País de la Libertad” de Radio Up 95.5 y reconoció la conmoción en la comunidad. “El pueblo está muy dolido, especialmente los familiares y amigos de Lucas», señaló, aunque pidió paciencia para esperar los resultados oficiales.
“Nos tenemos que atener a lo que dicen los peritos forenses”, afirmó, mientras admitía que aún no había visitado la comisaría ni dialogado con los policías implicados.
El intendente también comentó sobre las condiciones de la comisaría, que calificó de precarias: “El lugar de detención no es adecuado. Esto también forma parte de los problemas que debemos resolver”, declaró. Sin embargo, subrayó que la detención de Lucas fue resultado de una denuncia por violencia familiar realizada por su cuñada.
En respuesta, José Escalante desestimó esas acusaciones como un intento de justificar lo ocurrido. “Ellos dicen cualquier cosa para tapar lo que hicieron. A mi hijo lo detuvieron sin motivo y lo mataron ahí dentro”, sostuvo.
Mientras el caso avanza lentamente en los tribunales, la familia Escalante sigue reclamando justicia. “No vamos a parar hasta saber la verdad y que paguen los responsables”, dijo José. “Lucas era muy querido por todos. Esto no puede quedar así. Si los jueces no actúan, esto va a seguir pasando”, concluyó.