Este sábado, un incendio de grandes proporciones arrasó con la vegetación cercana a la Ruta Provincial 204, en el municipio de Candelaria. Las llamas avanzaron rápidamente, afectando líneas de tendido eléctrico y dejando sin servicio a varios barrios del sur de la localidad.
Bomberos Voluntarios de Candelaria respondieron al siniestro desde el primer momento, pero la magnitud del fuego obligó a solicitar refuerzos a sus colegas de Santa Ana. Ramona Blanco, presidenta de la Comisión de Bomberos Voluntarios de Candelaria, subrayó la relevancia de la colaboración intermunicipal para enfrentar emergencias de este tipo.
“La cooperación es clave para combatir estos incendios, que muchas veces se originan por la irresponsabilidad de quienes queman basura sin considerar las altas temperaturas y la sequía. El fuego puede propagarse rápidamente y causar destrucción en cuestión de minutos”, advirtió Blanco.
Además, hizo un llamado a la conciencia ciudadana: “Las condiciones de calor, sequía y viento hacen que cualquier incendio sea potencialmente devastador. Es fundamental que las personas eviten prender fuego en sus casas o campos, ya que esto pone en riesgo no solo sus propiedades, sino también las de sus vecinos, e incluso la vida de los animales”.
Restablecimiento del suministro eléctrico
El incendio afectó la estación transformadora de Candelaria, interrumpiendo el suministro eléctrico en Profundidad y áreas aledañas. Energía de Misiones informó que personal técnico trabajó intensamente para restaurar el servicio en pocas horas, mientras los bomberos lograron contener las llamas antes de que causaran mayores daños.
Otro foco en Posadas
Simultáneamente, en Posadas, un incendio de malezas se inició cerca del Campus de Miguel Lanús, extendiéndose hacia áreas cercanas al INTA y la Biofábrica. Las llamas, reportadas alrededor de las 11:30 detrás del barrio Centro Correntino, movilizaron a los Bomberos de San Isidro y a refuerzos adicionales, quienes trabajaron para evitar que el fuego alcanzara zonas críticas.
La contención de ambos incendios fue posible gracias a la rápida acción de los bomberos, el apoyo de dotaciones adicionales y el uso de un helicóptero para combatir las llamas desde el aire. La coordinación entre cuerpos de bomberos y autoridades locales resultó crucial para minimizar los daños y proteger a las comunidades afectadas.