Así lo afirmó Alejandro Verón, concejal de la mencionada localidad, en diálogo con Radio Up 95.5. Además, el edil criticó la falta de interés y accionar de sus colegas y apuntó que “lo que prima en Iguazú es un desorden absolutamente organizado”.
Los ecos de la crisis en los pasos fronterizos continúan resonando en Puerto Iguazú. Y es que tras la llegada de la temporada alta en materia de turismo, los controles de la ciudad de ven nuevamente colapsados y generan un malestar general en la localidad.
En este sentido, el concejal Alejandro Verón dialogó con este medio donde indicó que “esto se repite con bastante frecuencia en Puerto Iguazú en época de temporada alta”.
“Hace mucho tiempo no veíamos una situación así de caótica, a tal punto de que inclusive desde el centro de frontera de Puerto Iguazú se envió personal a otros pasos fronterizo a cubrir lo que la gente de migración llama ‘pase de comisión’”, comentó.
“Lo que termina generando esto es que en Puerto Iguazú falta personal, sumado a la cuestión de infraestructura que limita la posibilidad de atender en simultáneo”, agregó el concejal.
Además, Verón apuntó que “la situación del lado brasilero es similar, con el agravante de que los brasileros terminan dando la vuelta, por lo que muchos turistas argentinos que están cruzando a Brasil y sumado a que el brasileño no viene, genera un perjuicio para el comercio y el turismo local de Puerto Iguazú”.
En este sentido, el concejal manifestó que “el visitante que viene vía terrestre o inclusive que toma algún servicio de transporte urbano de pasajeros o las mismas agencias de viajes, se colapsa porque el centro de frontera de Puerto Iguazú tiene infraestructura totalmente obsoleta”.
Respecto a la situación del paso fronterizo y sus controles, Verón resaltó que “este fue un proyecto para hace 20 años atrás, con una situación totalmente distinta y esto se colapsa en época donde hay temporada alta y lo termina padeciendo el vecino de Puerto Iguazú, de Ciudad del Este, de Foz de Iguazú, porque se generan problemas y congestiones que terminan en realidad perjudicando a todos”.
“Esta infraestructura estuvo pensada para otro tipo de tráfico, pero hoy estamos hablando de casi 1.200.000 habitantes en un radio de 50 kilómetros que, si quiere venir a consumir algo acá en Puerto Iguazú, se colapsa generalmente”, explicó.
“Iguazú pierde comercial y turísticamente por no tener un centro de frontera con una infraestructura acorde a la lógica del contexto actual”, sentenció el conejal.
Por otro lado, Verón se refirió a las modificaciones que deberían tener lugar en los diferentes pasos y reveló una de las propuestas que él mismo realizó en el año 2016 y que fue categóricamente ignorada.
“Esta propuesta viene del año 2016, cuando yo integraba lo que se llamaba Cámara Territorial del Concejo de Desarrollo de Puerto Iguazú, donde se trabajan propuestas e iniciativas que beneficien al desarrollo local y de la región trinacional”, reveló el concejal.
“Es una propuesta que ya tiene sus años y que en su momento fue presentada para actualizar la infraestructura de lo que es la zona de Comercio Exterior”, explicó.
“Iguazú tiene la particularidad de contar con 16 casillas de las cuales funcionan seis. Eso se debe a que cuando se construyeron las 16 casillas, se pusieron una atrás de la otra lo que hace que funcionen seis naturalmente y las otras 10 estén obsoletas”, señaló Verón.
Para el concejal, “es algo que no tiene sentido porque achican los carriles y además están los dos carriles de control aduanero, entonces se produce un cuello de botella por todos lados y la infraestructura que se generó allá por el 2015, lo que hizo fue agravar el problema”.
“Nosotros lo advertimos y propusimos una solución que no se tuvo en cuenta, eso se construyó y fue un caos”, criticó el edil.
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En tanto, señaló que “la medida a corto plazo sería tomar esa casilla que está en una posición recta, una atrás de la otra y girarla a 45° grados para que para que esas casillas obsoletas funcionen en simultáneo y después agrandar lo que es el carril del control para los aduaneros”
Además, indicó que “se plantea un cambio en la legislación para que el canal verde también nos afecte a los vecinos de Puerto Iguazú y se traslade el control migratorio hacia lo que sería la salida de Paraguay”.
De igual manera, apuntó que “no hay injerencia del Concejo Deliberante de Iguazú porque a la mayoría de los concejales no les importa esto”.
“El presidente del Concejo Deliberante, que el año que viene renovaría su mandato, desde que yo asumí el día 10 de diciembre del año pasado, no ha presentado ningún tipo de iniciativa que tenga que ver con medidas de impacto en el desarrollo local de Puerto Iguazú y menos en medida que tengan que ver con la integración regional”.
“Lo que termina primando en Iguazú es un desorden absolutamente organizado. Esto le beneficia a alguien porque se beneficia gente con la aduana totalmente colapsada. Acá se tocan muchísimos intereses”, sentenció.
