Flavia Morales, la diputada mandato cumplido, defendió la creación de la Escuela de Robótica con duras palabras contra el oficio de los docentes, empleados estatales y policías. Pero, además, cuestionó el actual funcionamiento de la escuela que ella misma ayudó a crear. Lo dijo en una entrevista radial que la propia exdiputada reposteó en sus redes sociales.
La exdiputada nacional Flavia Morales volvió a usar las redes sociales y generó controversia por sus fuertes declaraciones contra el modelo político y social de la Renovación, previo a la creación de la Escuela de Robótica, cuando los adolescentes solo tenían como aspiración –según sus dichos– convertirse en docentes, policías o empleados de la administración pública.
Este 1° de mayo, en el día internacional del trabajador, la diputada mandato cumplido subió el fragmento de una entrevista radial en la que cuestionó las aspiraciones de los adolescentes misioneros antes de que el gobierno provincial creara la Escuela de Robótica, siendo ella misma, una de sus impulsoras.
“Pensar en la Escuela de Robótica fue recorrer la provincia de norte a sur, de este a oeste, y escuchar que la máxima de los sueños, reunión con jóvenes no de política, escucharlos, o sea lo que el político por ahí no hace, escuchar… la máxima de un pibe de 17 – 18 años, con todo el respeto del mundo, era ser policía, ser docente, o entrar a la administración pública. Si esos son los sueños de un pibe, pegate un tiro, porque tu política no sirvió”, fustigó Morales en el fragmento de la entrevista que ella misma reposteó en su cuenta oficial en Twitter.
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Estas declaraciones que parecen encerrar una crítica a un modelo político en el que el empleo público forma parte de las aspiraciones de ascenso social de los jóvenes, generaron un profundo malestar entre docentes misioneros, la mayoría de los cuales llevan adelante protestas para conseguir salarios dignos, luego de que el gobierno renovador fijara el piso salarial en los $208 mil, casi la mitad de una canasta básica alimentaria para una familia tipo en Misiones.
Sin embargo, para dejar en claro que no apoya el actual funcionamiento de la Escuela de Robótica, Morales escribió en el posteo en X, que la institución se basa en cursos, lo que no responde a los lineamientos originales de la institución. “Cursilandia , la conocen ? No van a poder comprender nunca que es @SiliconMisiones porque los lineamientos no eran cursos , es l que la provincia de misiones no quiere ,desarrollo del sector privado , sano no estado dependiente . Privado independiente , que no responda al gob !”, criticó Morales, profundizando sus cuestionamientos contra el empleo estatal, representado por docentes, policías y empleados públicos.
Cursilandia , la conocen ? No van a poder comprender nunca que es @SiliconMisiones porque los lineamientos no eran cursos , es l que la provincia de misiones no quiere ,desarrollo del sector privado , sano no estado dependiente . Privado independiente , que no responda al gob ! pic.twitter.com/tvqR60IOtn
— Flavia L. Morales (@flalomorales) May 1, 2024
De hecho, al relacionar la entrevista con las declaraciones en X, Morales parece señalar que la escuela de Robótica, tal como está funcionando actualmente, no estimula el desarrollo del sector privado independiente del gobierno de la Renovación, que administra la provincia desde hace más de 20 años.
Cabe aclarar que Morales fue una funcionaria de renombre en la Renovación, pero quedó marginada de la Escuela de Robótica y de los lugares de importancia en el Estado provincial después de que desobedeciera una orden explícita del conductor de la Renovación, Carlos Rovira, en 2020, cuando siendo diputada nacional, votó a favor de la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE)
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En 2017 cuando logró ser electa como diputada nacional, estalló el escándalo por la malversación del Fondo Nacional de Incentivo Docente (Fonid) y Morales es una de las imputadas: cobraba la asistencia nacional para docentes que no llegan al piso salarial, sin ejercer la docencia efectiva, sin estar al frente de un aula. La exdiputada se vio beneficiada por el estancamiento de la causa, que ahora está en el Juzgado Federal de Posadas.
Según consta en el expediente de la causa federal impulsada por las sindicalistas Estela Genesini (Udnam) y Mariana Lescaffette (Semab), Morales y otros exfuncionarios, funcionarios, diputadas, y exdiputadas, estaban anotados en “escuelas fantasma”, cuyos CUISE (Código Único de Identificación en el Sistema Escolar) eran apócrifos y de esa manera, cobraban el Fonid pese a no desempeñar tarea docente alguna.
En el caso de Morales, este medio pudo acceder al recibo de sueldo por el que percibía los fondos nacionales en 2017, anotada en una “escuela trucha” cuyo CUISE era el nro. 1900. Paradójicamente, Morales ahora cuestiona que los adolescentes tengan aspiraciones de convertirse en docentes, pese a que existen pruebas de que ella misma se benefició de un reparto presuntamente espurio del incentivo docente.
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