Se trataría de una de las mujeres que forman parte de la causa del IFAI-Gate que se disparó hace más de un año con la filtración de chats privados del ex titular del instituto, Juan Marcelo Rodríguez, con decenas de mujeres de las que habría obtenido favores sexuales a cambio de contratos laborales, beneficios económicos y subsidios.
Luego del artículo publicado por este medio, respecto de la aparición de la Fundación Pindaytí de Posadas en los escandalosos chats del llamado “IFAI-Gate”, se conoció que una de las mujeres involucradas en la investigación judicial sería una empleada de Ceremonial y Protocolo de Casa de Gobierno de Misiones.
Según fuentes consultadas por Radio Up 95.5, Marlice Backes –actual empleada de Casa de Gobierno–, sería quien estuvo dialogando con el extitular del Instituto de Fomento del Agro y la Industria, Juan Marcelo Rodríguez sobre cómo conseguir un subsidio de unos $200 mil para la Fundación Pindaytí de Posadas.
En esa conversación filtrada por desconocidos en abril del 2022 y que dataría del año previo (2021), aparece el extitular del IFAI brindando instrucciones sobre cómo confeccionar el pedido de un subsidio a pagar en 24 cuotas, a tasa cero y con un año de gracia y qué documentación entregar al instituto, en orden de conseguir el crédito.
Luego, en la conversación, Rodríguez hace alusión a un vínculo sentimental con quien sería Marlice Backes y le pide que le recuerde la fundación que recibiría el subsidio. Allí es donde la usuaria de whatsapp identificada como “Marlis” y como “MB” le envía una captura con el nombre de la fundación Pindaytí (Personería Jurídica A–3725).
Esta fundación apareció en el Proyecto del Presupuesto 2024, aprobado en la Legislatura misionera y difundido en el Boleín Oficial n° 15.974 (Suplemento), en la lista de entidades sin fines de lucro que recibirán subsidios en 2024. A la fundación Pindaytí, que pertenecería a la empleada de Casa de Gobierno, le asignaron un subsidio de $2.174.824.
Desde que estalló el escándalo del IFAI-Gate, ni Marlice Backes ni sus jefes de Casa de Gobierno, emitieron comunicado alguno al respecto de las filtraciones que brindan indicios de la posible comisión de delitos de malversación de fondos públicos, cohecho, negociaciones incompatibles y dádivas, entre otros.
De hecho, no existe ninguna denuncia penal contra Rodríguez por la presunta malversación de fondos del Estado, a través de contratos y subsidios repartidos entre mujeres que habrían otorgado favores sexuales al renunciado ex presidente del IFAI. La única investigación “en curso” es la iniciada por el propio ex funcionario renovador por la violación de su privacidad por parte de supuestos hackers. Y la misma está estancada y sin avances, en el juzgado de instrucción del juez Ricardo Balor.
Como sea, más allá de las obvias explicaciones públicas y legales que deberían dar los involucrados –Rodríguez, Backes y la ignota fundación Pindaytí–, este caso no sería aislado: existen varias fundaciones ligadas a funcionarios y empleados estatales misioneros que recibirán jugosos subsidios en 2024.
Asimismo, un análisis exahustivo de los chats “calientes” de Rodríguez, viralizados a fines de abril del año pasado, permite dar cuenta de ciertas constantes: varias de las víctimas del ex vicepresidente de la Legislatura misionera, son militantes de la Renovación. Y en algunos casos, se trataría incluso de funcionarias y concejalas renovadoras.
Es decir, mujeres que hacían o hacen “política partidaria” en la Renovación, debían brindar favores sexuales al jefe del IFAI, para conseguir asistencia económica, nombramientos y otras dádivas.
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