El inicio del ciclo lectivo quedó marcado por un paro docente de 48 horas en reclamo de mejoras salariales y mayor inversión en infraestructura y comedores escolares. Mientras en las escuelas de gestión estatal la medida de fuerza cuenta con el respaldo del gremio UTEM-FTEL, en el sector privado la adhesión es más difícil debido a presiones sobre el personal docente.
Leandro Sánchez, secretario general de UTEM-FTEL, explicó que la decisión del paro no fue tomada sin instancias previas de diálogo. “Llegamos a paro, pero no sin diálogo previo”, afirmó, detallando que intentaron negociar durante enero y febrero sin éxito. “Tratamos de ir al lugar en enero, en febrero, más de una ocasión para no llegar al paro. Pero lamentablemente, imagínese que el comedor de muchas de las escuelas que nombra el gobernador, hoy no va a comenzar”.
Uno de los puntos más críticos del reclamo es la insuficiencia del presupuesto destinado a los comedores escolares. “Cuando inicie el comedor va a comenzar con 380 pesos que mandan por día por alumno en escuelas de jornada completa, para desayuno y almuerzo”, denunció. Explicó que este monto es particularmente insuficiente en zonas rurales afectadas por la crisis económica. “En un contexto de tareferos sin yerba, porque hay paro, necesitamos un comedor más fortalecido”, subrayó.
Además, cuestionó la falta de inversión en infraestructura escolar. “Necesitamos encontrar escuelas reparadas, cosa que en una minoría muy pequeña pasa. Y en otra mayoría muy grande, las reparaciones no se hicieron”, señaló. En muchos casos, las escuelas permanecen en las mismas condiciones que cuando cerraron en diciembre. “Sí se cortó el pasto en muchos lugares, porque eso lo hacen los intendentes de la zona. Se fumigaron algunas escuelas, porque eso lo hacen los intendentes. Pero el resto sigue igual”, explicó.
El salario también es una de las principales preocupaciones del sector. “Lo único que hubo de incremento son 50 mil pesos, que no alcanza para mucho”, dijo. En este sentido, ilustró la dificultad de los docentes para costear sus necesidades básicas. “El profesor de Educación Física no es que va a poder comprar una zapatilla nueva como elemento de trabajo fundamental con esos 50 mil pesos”, sostuvo. También cuestionó los costos de transporte. “No sé cuánto combustible vamos a poder cargar con esos 50 mil pesos para llegar a la escuela todos los días del mes”, agregó.
Sánchez criticó la postura del gobierno provincial y la desconexión de los funcionarios con la realidad educativa. “El vicegobernador ahora nos habla de Internet y de las bondades de Internet, de las novedades que él va a ver a Estados Unidos. Va a Estados Unidos y ve otro país y cree que lo puede traer para acá, pero no le da de comer a los pibes”, sentenció. También cuestionó la falta de condiciones básicas en muchas escuelas. “Hace poco me comentaba un docente del norte de la provincia que fueron a hacer todo el circo de conectar Internet y hoy no había luz en la escuela”, relató.
Por otro lado, en el sector privado, la situación no es distinta en cuanto a los reclamos salariales, pero la adhesión al paro se dificulta por presiones laborales.
Te dejams el testimonio de Leandro Sánchez:
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“A la hora de hacer el paro, hay mucha presión”
Silvio, docente en una escuela de Posadas, relató la compleja situación que atraviesan los trabajadores de la educación en el sector privado. “La situación de mis colegas en los colegios es muy complicada porque hay muchas presiones”, aseguró. Explicó que, aunque muchos docentes apoyan el reclamo, tienen miedo de adherirse.
“Sé que comparten los reclamos, son conscientes de la situación de la provincia y de los docentes, más allá de que han expresado su apoyo y que muchos colegas participan de las medidas en la medida de lo posible. Van a las asambleas, van a las manifestaciones, pero a la hora de hacer el paro, hay mucha presión”, afirmó.
Detalló los riesgos que implica plegarse a la medida de fuerza en su sector. “Así como algunos directivos, algunos supervisores, ejercen presión, mandan circulares, realizan amenazas, en las cuales se va… No sé si diría que es más, pero se siente esta presión”, explicó. En el ámbito de la gestión privada, la estabilidad laboral es más frágil. “Pueden no renovarte el contrato, pueden despedirte”, indicó.
Silvio también criticó el rol del sindicato de docentes privados, SADOP, al que acusó de no representar a los trabajadores como debería. “Lamentablemente tengo que decir que no está ocupando el lugar que le corresponde, porque no ha adherido a esta medida”, denunció. Recordó que hubo un momento en que se esperaba una adhesión conjunta con la CGT, pero finalmente esto no ocurrió. “En algún momento, junto con CGT, iban a adherir, pero después no adhirieron”, dijo.
Además, resaltó que los docentes privados enfrentan las mismas dificultades económicas que los estatales. “El docente privado no tiene una situación diferente a la del estatal”, afirmó. Si bien reconoció que las condiciones edilicias de los colegios privados suelen ser mejores, señaló que “en cuanto a lo salarial, es la misma situación”.
Sobre el aumento salarial ofrecido por el gobierno, mencionó que el porcentaje de incremento fue igual para ambos sectores. “Nos dieron 10% de mayo a febrero y 3% de mayo a julio. Es decir, en el semestre el aumento es del 13,4%, y es lo mismo para los docentes de escuelas estatales que para los docentes de gestión privada”, explicó.
Finalmente, cuestionó la manera en que se negoció este ajuste. “En la negociación que hace el gobierno con los gremios amigos, o por no decir traidores, el aumento es el mismo”, criticó.
Te dejamos el testimonio de Silvio: