Finalmente, no habrá interrupción del servicio de transporte urbano en la provincia a partir de la medianoche, tras el reclamo de los trabajadores. UTA había ratificado la medida, pero la provincia intervino para garantizar el servicio.
“En un principio vamos al paro”, había sido la afirmación clara y directa de una fuente involucrada en las negociaciones a este medio, dejando en evidencia que las probabilidades de evitar la medida de fuerza eran escasas. Sin embargo según se supo la provincia intervino con la necesidad de mantener el servicio en beneficio de los usuarios.
Tras las negociaciones, se llegó a un acuerdo de $1.060.000 de básico inicial (básico con presentismo) y luego el pago relacionado a la antigüedad. Por otro lado, más adelante se discutirá una cifra de remante que será abonada en tres veces. “Hay varias discusiones que quedaron pendientes para las próximas reuniones”, expresaron.
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El conflicto a nivel nacional radica en la falta de acuerdo entre los empresarios del sector y el gobierno nacional. “Nación no se quiere hacer cargo”, expresó, añadiendo que, hasta el momento, tampoco hay intención de dictar la conciliación obligatoria, una medida que podría haber frenado el paro.
“Tenemos la posibilidad de que el gobierno provincial se ponga de acuerdo con los empresarios y firmen un acuerdo”, comentó la fuente consultada más temprano, aunque también advirtió que la solución depende de que se llegue a un consenso sobre las escalas salariales que los conductores de colectivos están demandando.
