En diálogo con el programa «El País de la Libertad», emitido por Radio Up 95.5, la jueza de faltas de Posadas, Bettina Balbachan, destacó avances en la actitud ciudadana hacia el cumplimiento de normas en el marco de las festividades. Aunque reconoció que las infracciones comunes persisten, valoró que la sociedad está condenando socialmente las faltas más graves.
“Antes, ciertas conductas eran vistas como un desliz políticamente incorrecto. Hoy, en cambio, existe una mirada social que condena esas acciones que no se ajustan a las reglas”, expresó. Según Balbachan, este cambio es evidente, “incluso entre los jóvenes vemos que hay mucha más conciencia, ya que, tienen un conductor designado. A esto me refiero a las faltas más graves que tienen que ver con la ingesta de alcohol”, señaló.
La jueza también subrayó la importancia del cambio cultural para mejorar la convivencia en la ciudad. “Por suerte el ciudadano posadeño tuvo una actitud, conducta y compromiso muy notable este año” dijo y ejemplificó “sobre los casos de dengue; tiene que ver con un cambio en la actitud ciudadana de limpiar sus patios que es algo fundamental”.
En este sentido, “cuando las personas sienten que sus acciones son importantes y generan cambios, tienden a modificar su conducta”, afirmó, destacando la necesidad de educación y concienciación social.
En cuanto a la tramitación de actas de infracción, Balbachan explicó que el Juzgado de Faltas logró mantener las notificaciones al día, a pesar de la gran cantidad de actas ingresadas diariamente. “Las notificaciones están al día, lo que garantiza que las personas no vean vulnerado su derecho de defensa. Cuando se comete una infracción, se entrega una copia del acta con las instrucciones necesarias para efectuar un descargo o seguir el proceso”, señaló.
En el marco normativo, Balbachan destacó avances en cuestiones como la limpieza de terrenos baldíos, donde inspectores realizan informes detallados sobre las condiciones sanitarias y estructurales. En caso de riesgo sanitario, el municipio puede intervenir directamente y cargar los costos al propietario, siempre que no haya moradores y que el terreno esté abierto. “Si existen cerramientos o moradores, se requiere la autorización del Poder Judicial para proceder”, explicó.
Sobre el fenómeno de los «moto-uber», Balbachan reconoció la necesidad de avanzar en legislación específica. “Es un tema que claramente requiere atención, aunque no puedo profundizar porque tengo casos pendientes de resolución en mi juzgado”, comentó.
Finalmente, la jueza reflexionó sobre el balance del año y el impacto de estos cambios. “Creo que la toma de conciencia y la instrucción son fundamentales para transformar nuestra sociedad. Aunque aún queda mucho por hacer, los avances fueron significativos”, concluyó.
