Esta noche, la sala Mandové Pedrozo de Posadas será el escenario de un homenaje cargado de emoción en honor a Fernando Rosa, a nueve meses de su partida. En un acto sencillo pero significativo, familiares, amigos y allegados se reunirán para recordar al artista, comunicador y militante que dejó una marca imborrable en cada espacio que transitó.
María Paz Rosa, hermana de Fernando, expresó en diálogo con “El país de la Libertad” de Radio Up 95.5 su emoción por el homenaje a su hermano “Fernando fue muy querido en todos los ambientes en los que se movió, dejó una huella, una enseñanza”, dijo.
La actividad consistirá en la revelación de una placa con su nombre, la cual identificará oficialmente el escenario del teatro con el nombre artístico de su hermano: “El escenario va a llevar su nombre, Fernando Rosa, y entre comillas su nombre artístico, Rulo Espínola” y agregó “Fer era muy querido por todos, donde iba dejaba algo que cambiaba al grupo que lo conocía”.
El homenaje no solo busca recordar a Fernando, sino también destacar su contribución al mundo del teatro y la cultura misionera. “Él merecía mucho más que este pequeño homenaje”, agregó María Paz, reconociendo que este es solo un primer paso para mantener vivo su legado. “Mi hermano era muy reconocido, muy famoso, y cada vez que me cruzo con alguien, es como sentir un poco a él, es lindo estar aquí ahora, porque es vivir de otra manera el duelo y ayudar a transformar el dolor en un legado lindo”, comentó sobre el impacto que su figura sigue teniendo en la comunidad.
Fernando Rosa, quien estudió Comunicación Social en la Facultad de Humanidades y se complementó en el teatro y la política, era admirado tanto por sus dotes artísticas como por su brillantez intelectual. María Paz lo recordó con gran admiración: “Siempre lo admiré mucho, muy inteligente, tenía una facilidad impresionante para todo., para dibujar la realidad, para hacer chistes, tenía muchas capacidades y con eso transformaba cualquier circunstancia”.
El homenaje se realizará esta noche del jueves 3 de octubre, a las 20 horas en la sala Mandové Pedrozo, ubicada en la calle Beethoven, cerca del Club Capri. “Será un lindo encuentro entre los que lo queremos, recordándolo con risas, con afecto, porque eso es lo que él hacía, nos hacía reír y aprender a reírnos de nosotros mismo” concluyó María Paz Rosa.