Con el respaldo de 4 ediles, se aprobó un aumento no remunerativo de 400 mil pesos para concejales y la creación de 31 nuevos cargos. El intendente Ripoll prometió vetar la ordenanza.
En una sesión especial controvertida, un grupo de concejales de Garupá aprobó este jueves un aumento no remunerativo de 400 mil pesos en sus dietas. La medida, que contó con el apoyo de cuatro de los siete ediles, también incluye un incremento de 150 mil pesos para otros empleados del cuerpo legislativo y la creación de 31 nuevos cargos políticos.
El intendente de Garupá, Luis Ripoll, se comprometió a vetar la ordenanza, argumentando que los aumentos triplicarían el salario promedio de los empleados municipales y que los nuevos cargos duplicarían el número de funcionarios en el Concejo Deliberante.
La sesión extraordinaria fue convocada con carácter urgente al cierre de la sesión ordinaria del miércoles, a instancias de los concejales Miguel Rauber (presidente del cuerpo), Joselo Vieira, Raquel De Moraiz y Marina Rodríguez, todos opositores a la gestión de Ripoll. Durante la reunión de esta mañana, los ediles aprobaron el incremento sin participación de los concejales Joselo Peralta y Delia Dujaut (ambos del espacio Presente y Futuro Renovador, alineados con el intendente), ni de Rodolfo Kucszak, de Cambiemos, quienes decidieron no asistir y se han mostrado en contra de la medida.
El Concejo Deliberante de Garupá actualmente cuenta con siete concejales y una estructura de 26 empleados, entre trabajadores de planta permanente y contratados. La ordenanza, de no ser vetada, elevaría la planta a más de 50 empleados, casi duplicando el personal del Concejo. Este movimiento ha causado indignación en varios sectores de la comunidad local, que ven en la creación de nuevos cargos una medida innecesaria y costosa en un contexto económico difícil.
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El intendente Ripoll señaló que la decisión de los concejales opositores va en contra del interés de la comunidad, y prometió utilizar su facultad de veto para evitar que la medida entre en vigor. “Es una situación inadmisible para los vecinos de Garupá. En lugar de atender a las necesidades de la población, se priorizan aumentos injustificables para los propios funcionarios. No podemos permitir que el erario municipal se desborde de esta manera”, afirmó Ripoll en declaraciones a medios locales.
La medida puso de manifiesto la división política en el Concejo Deliberante, especialmente entre los concejales del Frente Renovador. Aunque los cuatro ediles que impulsaron la iniciativa pertenecen a la misma agrupación, están enfrentados con la administración de Ripoll.
Por su parte, los concejales que aprobaron el incremento y la creación de cargos argumentaron que la medida es “una herramienta para mejorar el funcionamiento del Concejo” y que el incremento no remunerativo “se adecúa a los índices de inflación y los compromisos de trabajo asumidos por los ediles”. Sin embargo, esta justificación no parece convencer a gran parte de la ciudadanía ni a los concejales opositores.