La Cámara Federal de Tucumán confirmó el procesamiento por el delito de contrabando de un joven misionero que en 2020 fue detenido mientras viajaba en un colectivo con 17 lingotes de oro dentro de su mochila y allanó el camino para la elevación a juicio del expediente.
De acuerdo a la información recolectada, la causa tuvo su origen el 13 de marzo de 2020, cuando agentes de la Gendarmería Nacional Argentina (GNA) encontraron los lingotes tras requisar un micro que circulaba por la ruta nacional 34, a la altura del departamento La Banda, de Santiago del Estero.
Durante el control, los uniformados recorrieron el colectivo y así advirtieron que uno de los pasajeros intentó esconder un bulto. Ese bulto resultó ser una mochila y dentro de esa mochila dieron con 80.000 pesos, 17.650 dólares y 17 lingotes de oro de máxima pureza.
El pasajero fue detenido y más tarde fue identificado como J. M., un misionero que figuraba como monotributista categoría A, condición incompatible con el valor de los lingotes y la carga que transportaba.
El control se hizo en marzo de 2020, sobre la ruta nacional 34, en Santiago del Estero.
El implicado quedó detenido y se abrió una investigación que se sustancia en el Juzgado Federal Dos de Santiago del Estero, con intervención de la Unidad de Información Financiera (IUF) como querellante.
Al comienzo de la pesquisa, el misionero fue imputado por el delito de lavado de activos, aunque en el transcurso de la causa finalmente fue procesado por “encubrimiento de contrabando por receptación de mercadería”, que prevé penas de entre 6 meses y 3 años de prisión.
Justamente, la defensa del implicado apeló el procesamiento dictado por el juzgado interviniente, pero los magistrados de la Cámara Federal de Tucumán rechazaron el planteo y resolvieron dejar firme la resolución de primera instancia. La medida es sin prisión preventiva, es decir que el misionero aguarda el avance de la causa en libertad.
En el expediente se determinó que los lingotes tenían origen espurio ya que no poseían los sellos identificatorios y todo indica que fueron introducidos desde Paraguay, aunque para la Justicia J. M. recibió el material precioso en Buenos Aires, desde donde tomó viaje hacia Salta, aunque la maniobra fue interrumpida por el camino gracias al control de GNA.
Fuente:LVM
