La temporada de verano en Pinamar comenzó con sorpresas inesperadas. Aunque el contexto económico hacía prever un año complicado para el turismo, Lucas Ventoso, secretario de Turismo del municipio, destacó un cambio positivo en la tendencia.
“En mediados de diciembre venía bastante baja la demanda turística, pero después de Navidad tuvimos una llegada de turistas de manera espontánea, que no tenían reserva previa, y superamos, creo, bastante la concurrencia del año pasado. Fue muy llamativo”, expresó en diálogo con “La Mañana Informativa” de Radio Up 95.5.
A pesar de una semana con temperaturas que no superaron los 20 grados, el turismo despegó en Pinamar. “Los restaurantes empezaron a llenarse y tuvimos un inicio de temporada bastante bueno, superando la expectativa que teníamos”, agregó Ventoso, quien atribuyó este fenómeno a “los buenos precios que tenemos en Pinamar y la competitividad frente a otros destinos del país”.
Precios competitivos y experiencias únicas
Ventoso destacó que el turista nacional encuentra en Pinamar una experiencia accesible y única: “El turista que llega a Pinamar va a tener aquí los mismos costos gastronómicos que tiene en su lugar de origen, y quizás más baratos, pero comiendo en un restaurante frente al mar, en Valeria del Mar o en Cariló”. Este atractivo se suma al efecto de las redes sociales y el boca a boca, que ayudaron a impulsar la llegada de visitantes.
Sin embargo, el contexto económico también ha impactado los niveles de rentabilidad. “La baja de competitividad con el exterior hizo que los niveles de ganancia neta estén muy por debajo del año pasado. Por ejemplo, los alquileres en dólares se mantuvieron igual que el año pasado, pero al haber bajado el dólar en un 20% o 30%, se traduce en precios más baratos en pesos”, explicó Ventoso.
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Ocupación alta, pero con estadías breves
Con una capacidad total de 340.000 plazas, Pinamar reporta un 85% de ocupación promedio en la primera quincena de enero. “Estamos hablando de que el 80% de esa capacidad son casas particulares y departamentos. Solo el 20% es hotelería”, indicó Ventoso. A pesar del buen nivel de ocupación, las estancias son más cortas que en años anteriores: “El promedio de estadías es de cinco días. Esto no nos permite pronosticar el recambio como antes, ya que la demanda es espontánea”.
Las carpas de playa reflejan esta tendencia. “Estuvimos haciendo encuestas y las carpas están al 90%, y en algunos casos al 100%. Los balnearios, que suelen reservar carpas para alquiler diario, las tienen todas ocupadas”, señaló Ventoso.
Recomendaciones para turistas
Con respecto a los alquileres particulares, Ventoso enfatizó la importancia de evitar plataformas de compraventa general. “Siempre recomendamos alquilar a través de inmobiliarias habilitadas o plataformas confiables como Booking. No usar plataformas donde uno compra cosas usadas, porque son foco de estafas, no solo en Pinamar, sino en todo el país”, advirtió.
Si bien el sector hotelero enfrentó mayores costos debido a la inflación, Pinamar mantiene su atractivo gracias a una propuesta equilibrada entre precio y calidad. “El que viene a Pinamar se va a dar cuenta de que la hotelería cuesta lo mismo que en Buenos Aires, y comer frente al mar puede salir incluso más barato”, afirmó Ventoso.
El secretario concluyó con optimismo: “Estamos frente a una temporada diferente, con vacaciones más cortas y espontáneas, pero con una concurrencia mayor a la del año pasado. Esto demuestra que Pinamar sigue siendo un destino elegido, incluso en un contexto económico difícil”.