La incertidumbre crece entre los trabajadores del Correo Argentino en Misiones debido a las amenazas de privatización del servicio postal, una medida que, según el secretario general del sindicato de trabajadores de correos de la provincia, Raúl Lezcano, podría dejar a miles de empleados sin empleo y afectar gravemente a las comunidades más alejadas del país.
Raúl Lezcano, secretario general del sindicato de trabajadores de correos de Misiones, en diálogo con Antonio Villalba en el programa “RX- Realidad Mixta” de Radio Up 95.5 expresó que “el domingo nos enteramos que se volvió a cargar el proceso de privatización de estas empresas, y con ello, desregular el servicio postal”. El sindicalista explicó que este avance puede tener consecuencias devastadoras para los trabajadores y las localidades más aisladas, donde el Correo Argentino cumple una función esencial.
“Si nos privatizan, el que compre la empresa no va a querer trabajar en lugares donde no es rentable”, aseguró Lezcano. En Misiones, este panorama es particularmente preocupante. Si bien no se ha cerrado ninguna sucursal en la provincia, el dirigente teme que, en caso de que se avance con la privatización, “el correo va a desaparecer de muchas localidades de la provincia. Las oficinas en lugares remotos no serán rentables para las empresas privadas”.
El Correo Argentino, según detalló Lezcano, no solo cumple con la distribución de cartas y paquetería, sino que además brinda un servicio clave en áreas como la notificación judicial, la entrega de documentos oficiales, pasaportes y giros sociales. En localidades donde no hay bancos, el Correo también asume el rol de pagar sueldos a personal de distintas instituciones, como la Gendarmería o el Ejército. “Somos el único medio para distribuir los pagos, como el sueldo a las fuerzas de seguridad. Sin el Correo, esas personas no cobrarían”, explicó.
«Nos obligan a prestar un servicio social esencial»
Lezcano destacó que, a pesar de las dificultades que enfrenta la empresa estatal, el Correo Argentino sigue prestando un servicio fundamental para la población, en especial en contextos críticos como la pandemia. “Durante la pandemia, el Correo fue declarado un servicio esencial para distribuir medicamentos y pagos cuando los bancos no funcionaban. El Gobierno nos obligó a seguir prestando ese servicio en todo el país, y hoy nos quieren privatizar”, señaló.
En cuanto al impacto sobre los empleados, el sindicalista explicó que muchos de los trabajadores más cercanos a la jubilación ya se acogieron al retiro voluntario. “Cuando se habilitó el retiro voluntario a principio de año, muchos compañeros con 40 o 50 años de servicio se fueron. Quedaron unos pocos, pero la mayoría somos empleados jóvenes”, comentó Lezcano. Actualmente, la plantilla de trabajadores en Misiones es de unos 250 empleados, de los cuales 70 se retiraron a principios de año.
Sin embargo, los empleados más jóvenes son los que enfrentan un futuro incierto. “Lo que más nos preocupa es la cantidad de gente que va a quedar sin trabajo”, afirmó Lezcano, y agregó: “El problema no es solo el empleado que se queda sin trabajo, sino las familias que quedan en la calle. Porque si cierran oficinas, muchos compañeros perderán su empleo”.
Lezcano subrayó que la falta de empleo en Misiones agrava aún más la situación de los trabajadores del Correo. “Hoy, la gente va a hacer Uber porque no hay trabajo. No hay alternativas laborales. Y el mercado está saturado, con miles de personas buscando empleo”, expresó el dirigente.
El sindicalista también cuestionó las decisiones del Gobierno en relación a la privatización, mencionando que, si bien el proceso aún no se ha concretado, las señales apuntan a que será un hecho en el corto plazo. “La gente que está en el Gobierno viene prometiendo estas privatizaciones desde hace mucho tiempo, y ahora están cumpliendo. Todo indica que para el año que viene ya vamos a estar en la etapa final de la privatización”, sostuvo.
“En Misiones, todas las oficinas del Correo tienen edificios propios. Muchas veces, las oficinas cuentan con una casa para el jefe de la sucursal. Si el Gobierno decide privatizar, las nuevas empresas que tomen el control no estarán obligadas a mantener las oficinas en todos los lugares. Ellos van a priorizar la rentabilidad, y ahí se van a ver los cierres” dijo Lezcano al ser consultado por las oficinas del Correo en Misiones.
