Con la llegada de diciembre, comienza la búsqueda de adornos y arbolitos para decorar los hogares y recibir la Navidad. Un equipo de Radio UP recorrió las calles de Posadas para comparar los precios de los productos navideños, revelando grandes diferencias según el lugar de compra.
En los comercios multirubros que se encuentran en el centro, el costo de un arbolito de 1,80 a 2 metros oscila entre $42.000 y $48.000, mientras que en locales de firmas reconocidas un árbol más frondoso, 3 metros, puede alcanzar los $530.000. En cuanto a los modelos más pequeños, de 1,50 metros, el precio en los comercios populares es de $32.000, mientras que en locales de marca asciende a $63.500.
El recorrido también evidenció importantes variaciones en los precios de las clásicas guirnaldas. En los comercios más económicos, se ofrecen promociones de seis unidades, plateadas por $1.200, mientras que en locales reconocidos el precio se eleva a $14.300 por un paquete de nueve. Sin embargo, no todas las decoraciones presentan diferencias tan marcadas. Por ejemplo, las luces LED multicolor de 100 unidades tienen un costo de $3.500 en los negocios multirubros y $4.700 en los locales más exclusivos, mostrando una discrepancia de $1.200.
En cuanto a la tradicional estrella para coronar el árbol, los precios alcanzan los $4.800 en los locales más económicos. Por último, los gorros navideños, otro clásico de la temporada, se pueden encontrar desde $790 en su versión sencilla, mientras que los modelos más elaborados, con apliques de lentejuelas, tienen un precio de $5.990.
Esta comparación de precios deja en evidencia que decorar el hogar para la Navidad puede implicar una inversión muy variable dependiendo del lugar de compra. Si bien las opciones económicas permiten ajustar el presupuesto, los locales de mayor renombre ofrecen productos de mayor calidad, diseño y facilidades de pago, por ejemplo: 3 cuotas sin interés a partir de $30.000 y 6 cuotas sin intereses a partir de $50.000.
De cualquier manera el espiritú navideño ya se siente en las calles posadeñas y en las casas de todos, que con lo poco o mucho que tienen preparan el hogar para recibir las fiestas de fin de año.